Uma denúncia grave, que é mais um retrato da lamentável postura da Prefeitura de São José dos Campos (comandada por Eduardo Cury, do PSDB) na questão do Pinheirinho.
Tratores da Urbam (Urbanizadora Municipal), empresa da Prefeitura de São José dos Campos, estão sendo utilizados para derrubar as casas no Pinheirinho, medida que deveria ser realizada e paga por quem reivindica a área, ou seja, a massa falida da Selecta, de Naji Nahas. Essa determinação consta na própria determinação judicial.
Com a medida, a Prefeitura utiliza recursos públicos para atender a interesses privados. Aliás, conduta do governo municipal utilizada há tempos na questão Pinheirinho.
Para o advogado do movimento, Antonio Donizete Ferreira, a Prefeitura, além de atuar em favor de Naji Nahas, desrespeita a própria Constituição Brasileira, em seu artigo 37.
O movimento deve contestar mais esta ação ilegal da Prefeitura de Eduardo Cury.
Não custa lembrar: antes da reintegração, a costura do acordo entre os governos federal e estadual previa que a Prefeitura não precisaria colocar nenhum centavo para regularizar o Pinheirinho, mas agora gasta muito dinheiro público para beneficiar Naji Nahas e para manter uma política fascista que oferece passagens rodoviárias a pessoas que "queiram voltar às cidades de origem".
http://solidariedadepinheirinho.blogspot.com/
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=NBjjtc9BXXY
Um observatório da imprensa para a cidade de Bom Despacho e os arquivos do blog Penetrália
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terça-feira, 24 de janeiro de 2012
domingo, 18 de abril de 2010
Blog do Brizola Neto
Um blog muito bom a respeito de política, contando inclusive com o colunista da Folha de São Paulo e professor universitário Gilberto Vasconcellos, que durante o governo FHC deu uma lavada nele com o livro O Príncipe da Moeda:
http://www.tijolaco.com/
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quarta-feira, 31 de março de 2010
Um Poema da Colômbia (do blog Bitácora del Párvulo)
Y ahora qué más da;
Si nos hemos quedado solos,
que nos invadan sería lo mejor.
Sería una bendición para nuestra tierra
que rodeen nuestras fronteras
y que nos invadan nuestros
hermanos latinoamericanos.
Que nos invadan los ecuatorianos,
tal vez así volvamos a tener
de tierno maíz el corazón que perdimos.
¡Que nos invadan los cubanos!
Para que nuestros niños
se eduquen gratuitamente
y no mueran en las puertas
de los hospitales privados.
Que venga lo mejor de nuestra América.
Que venga un contingente
de garotas brasileras
que nos hagan el amor hasta
perder la leve fuerza que se necesita
para apretar un gatillo.
Sería lo mejor para Colombia
una invasión brasilera a gran escala;
De pronto así, algún día,
ganemos un mundial de fútbol.
Necesitamos urgentemente
una invasión venezolana,
para volver a decir
las cosas con claridad,
con franqueza, sin santanderismos,
con elocuencia bolivariana.
Se requiere con urgencia
Una invasión boliviana,
que nos quite esa vergüenza
de ser indios; esa vergüenza,
que nos condena eternamente
al peor de los subdesarrollos.
Reclamo con ansias la invasión
de tropas de piqueteros argentinos,
de madres y abuelas de plaza,
que nos cuenten historias
en donde podamos reconocer
en nuestras propias historias.
Que vengan tropas españolas y chilenas,
a contarnos como se pudre el corazón
de una patria fascista.
Que Vengan los uruguayos
con sus mates amargos
a contarnos la milonga dulzona
y triste de sus desaparecidos.
Que vengan todos los hermanos
del mundo a esta tierra olvidada
a hacernos entender que nuestro
país no es el mejor país del mundo,
porque es una patria injusta.
Que Colombia es pasión...
y muerte.
Ojala nos invadan la batucada festiva
que acabe con nuestro luto,
que acabe con este silencio que aturde.
Estamos solos, a la derecha del mapa.
Sólo nos acompaña nuestro buen amigo
el que invadió el país de las mil y una noches.
Lizardi Carvajal
Neogranadino
quarta-feira, 3 de março de 2010
Cinco poemas para Fabular a História
coles 10 de febrero de 2010
Cinco poemas para fabular la historia - F.E. ®
Leí de Borges la aseveración de que el tiempo real de los noticieros cortó de tajo la creación del mito. De ahí entendí que la poesía debía ser esa interpretadora anti natura, formal y constante, de los hechos que nos quiere vender la historiografía determinista. El mito por lo tanto, es ese misterio básico que todo poema debe insuflar en lo concreto. Presento aquí algunos poemas en los cuales construí mi propia ruta histórica, es decir, la fabulación que me exigían mis propios sueños.
Primer y último canto para Yamahata.
Perdido una mañana, el fotógrafo, en una enmarañada y terrible ciudad, llega por fin a una colina desde donde ve aniquilada, por el resplandor de ayer, a Nagasaki que ahora, se le presenta adelante, interceptándole el paso.
Atemorizado su ánimo, de pronto se le aparece la sombra de Virgilio, que le infunde aliento y promete sacarle de allí, no sin antes hacerle atravesar el reino de los muertos, primero el infierno y después el infierno, hasta que finalmente, en el distante año de 1966, Beatriz (bello nombre de la muerte) le conduce al paraíso.
Echa a andar entonces, cámara en mano y tras Virgilio, va él, Yotsuke Yamahata.
No sé cuánto debo ver
para convencer a todos de este horror.
¡Cuán penoso es referir lo horrible!
¡Cuánto peso para una memoria tan sola!
Nagasaki me contempla con sus ojos calcinados,
me distingue de entre las ruinas,
repite en sus palabras el estallido silencioso
en el cielo de ayer.
Estoy en pie, sobre la colina donde cayó el sol,
un perro me ha seguido, olfateando mi vida,
pero no tengo agua ni milagros
y dejo entonces que se arrime a mi sombra.
Pregunto a quien encuentro acerca de la luz:
¿Cómo fue el brillo de la última sorpresa?
¿Cuál de todas las muertes fue el destello primero?
“¡Pero Ay, Yotsuke! ¿Pero es que no lo sabes?
Fueron los ciegos quienes lo vieron
fueron los sordos quienes escucharon,
una sola palabra fue dicha
y la ceniza pronto se hizo canto.”
Y tu nada me contestas Virgilio,
tu miras hacia abajo
hacia el brazo que se aferra a la idea de un niño,
señalas siluetas en las paredes,
caminas como el humo que se disipa revelando los espectros.
¡Ay cuánto pavor resumirá mi nombre!
¡Cuántos pedazos imposibles de agrupar!
Cuantos muertos posando esta muerte maldita
que se repite y prolonga en cada disparo de mi flash.
Tan lejos de lo que vi está lo que digo...
Lamento en Stalingrado
(1943 grados bajo cero)
Frío.
Es demasiado,
mis recuerdos ya no dan calor,
la nieve ha ido ablandando
el estruendo de los cañones
y me sumerge a pedazos
en un sueño sin voces,
largo,
de blancas metrallas.
Si tan sólo pudiera cantar
tiembla el Volga en los nervios de la estepa,
tiemblan mis manos mientras caen
las noches últimas...
Vienen ellos
entre un galope de escarchas,
sus bocas son inmensas como la ciudad muerta.
Me buscan adentro de las fábricas,
brigada fantasma del Mamayev,
buscan el rastro de mi sangre en coágulos,
pasan sin ojos
pasan
y la nieve es un adios,
un armiño que se pierde
en las tundras de mi sueño.
Historia lega
Fugit irreparabile amor
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
Y al principio, su nombre fue Amor, pero luego, al ser pulida en su espejo, el nombre dio vueltas en el tiempo, deslumbró al mundo y quedó como Roma
ante los ojos inversos de Dios.
Manes y Dioses, harinas y sales, en siglos de triunfo y arcos de tiempo el amor fue desterrado de entre los curites y decirte amor era jugarte la vida, atraerte las Furias, traicionar tu Venus infecunda.
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
De partos múltiples nació Mario, Escipión, César y Sila, y estos, a la vez, adoptaron a estatuas como hijos: Augusto, Tiberio, Trajano y Severo; pero en ninguno de ellos creció el amor, era el mármol quien levantaba ciudades, era el circo quien devastaba ciudades, y de su ombligo y de su grito brotó el Tíber con su mosaico de peces y ruinas multiplicadas… Nadie tuvo piedad por ella: la piedad era hija del amor y de esto, ella, no tenía nada, era seca como una almendra y frívola como patricia en celo.
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
Logaritmo ruinoso de piedra y granito Roma era un juego de manos y palabras, donde un día hubo imperio ahora reinaban los gatos monarcas, donde los gansos delatan a Breno ahora se estrechaban, orando, los beatos del charter y los curas petrificados. Nada quedó en su sitio, todo fue destruido en la ciudad sitiada. Odoacro fundó el caos y Rómulo una paz soñada. ¡Adiós al Quirinal, adiós a la Curia Hostilia! Si vas a Roma en busca del amor, encontrarás sus ruinas pero jamás la palabra, pero jamás el amor.
Variación lunática
Ad astra per aspera
00.69 GMT
Yo he estado aquí, he visto esto:
en el año 69 se descubre la forma
que tres motores eleven por fin
el obelisco magnífico de Luxor.
En Palenque se declara día nacional
y las estelas arden con fogatas en sus bases.
Pero nadie llega al cielo;
un impulso electromagnético
nos da la visión de un simulacro flotante
que por ser de piedra
caerá un día como un bólido,
en dos fases, sobre el mar de Bering.
En Tunguska, la taiga florece de nuevo
y los esquimales se callan el portento
de una aurora boreal rasgada en su mismo centro.
HRN se olvida de Armstrong y lo suple
con el nombre del primer salvadoreño
en poner un pie sobre la ingrávida Honduras.
La historia, no tiene estación ni frecuencia,
simplemente no existe.
El último P-51 es derribado en Goascorán
y la gente le cae a machetazos
come de sus entrañas
y levanta un altar para el último pájaro a pistones
en hacer la guerra.
00.61 GMT
En el año 61
Gagarin planea blanco sobre la materia oscura;
un guiño de espejos nos muestra el rostro hierático
del primer simio espantado en saltar al vacío.
Todos comen de sus frutos incandescentes.
La Madre Rusia le explica al mundo
a qué sabe lo auténticamente remoto.
00.45 GMT
Von Braun envía naves no tripuladas
a los cráteres de Londres y Amberes.
Las ruinas del universo crecen en tierra
y le dan nombre a quienes viendo el espacio
escupen su venganza, sus V-2, sus Vergeltungswaffe
sobre una humanidad de subsuelos
que busca en las raíces
la más leve muestra del brillo de las estrellas.
00.02 GMT
George Mélies
hace el primer retrato hablado de Julio Verne.
Mimo lunático
Verne se muestra pálido y molesto
con un proyectil incrustado en la mirada.
00-00.00000000001 GMT
Lo eterno
y los constantes viajes a lo bucólico,
a los estanques dormidos, al Mar de la Tranquilidad.
Los desvelos de Ovidio y Virgilio,
el tenue brillo de tus filtros
en los pasillos de Cnosos.
El triángulo que fuiste en las noches de Tanit,
veleidosa Chang- E
o polícroma Mani.
Selene infinita,
Ningal que despide y vela el paso
a los que huyen de noche.
Proyectil de corcho
que ningún mar hundirá,
batiscafo de los deslumbrados,
bandeja donde acumulas caderas,
piernas, manos, cabeza de Coyolxauhqui,
todos los bronces
todas las bramas de Calígula,
el aullido de la loba capitolina
y el esplendor en que doras columnas, capiteles,
el sexo vertido del hombre y la mujer,
todos los placeres, entonces, todas las savias
el ascenso al nombre, a las olas,
al liviano cuerpo transmutado a sudario,
calca de los solos,
bastión,
abismo,
perra.
El olvido
Mi nombre era Elliah T. Svenson
y luché en el 1/4 Batallón del Royal Norfolk Regiment,
Gallipoli, en 1915.
Una inmensa nube me trajo hasta aquí
al mundo de los ecos y el silencio.
De entre el polvo surgían las bayonetas,
los silbatos rompían los tímpanos
y en medio del resollar de la marcha
las órdenes que nos pedían aguantar
hasta la última gota de sueño.
Cierta mañana, la nube vino por nosotros.
La vimos llegar
como un lento amaranto en que la tarde se enreda,
y callamos
aún con las balas royendo la carne,
la vimos
y no supimos que la muerte
disfrazaba con glorias sus olvidos
y con visiones de niño
sus más antiguos pavores.
Yo fui Elliah T. Svenson
y nada tuve que ver con los carros de fuego.
No fui el santo ni el héroe,
desaparecí de los archivos
y hasta del consuelo de una tumba
para un soldado desconocido.
II
Yo fui Macario,
pez nominal atrapado
en la inmensa red del santoral.
Serví –pica y machete en mano-
en las últimas cargas de La Trinidad
y en el primer pelotón de voluntarios Texiguat en el 24.
Morazán brillaba a lo lejos
cuando al recibir la estocada desperté de pronto,
bajo las órdenes de Tosta en El Berrinche.
No pregunté nada,
quién mandaba o quién mataba,
las ametralladoras barrían hasta el nombre,
hombres de poca monta y ocultos bajo el sombrero
servíamos de fondo en los daguerrotipos de los Jefes.
En nuestros huesos apilados
se veían las iniciales que sólo una madre reconoce
en el recuerdo doloroso de su parto y de nuestra partida.
III
Me llamaron Deimones
y poco sabía del odio y de la sangre.
Levanté sarisas y empuñé la espada,
lleno de bronces, empapé el cuero con mi sudor
y le di a la falange un paso más
en su cuadrado andar hacia la muerte.
Poco sabía de historia y geografías
y sin embargo me vi de lleno
inmerso en las márgenes vitales del Ganges
y en las ásperas faldas del Hindo Kush.
A él lo vi de cerca, en una fugaz ocasión,
al girar los hetaroi
en el golpe de mano de Gaugámela.
Y no me impresionó:
su mirada era seca como en todo miedo
y su grito era un hilo de agua
vertida en la candente arena.
Después llegaron las flechas y los ayes,
el hermano perdía a su hermano,
y los nadies recorríamos a pie
el pedregoso camino hacia la estatua sin gloria.
Lo vi arder en Babilonia
sobre una pira de rumores e incertidumbre.
Luego partí con Seleuco y fui prisionero de Ptolomeo.
Entre los escalones del Faro de Alejandría
-desde hace mucho bajo el mar-
los pececillos muerden las huellas
de un esclavo que fue nadie
y que sin embargo levantó la luz
vio la luz y como un insecto
quedó incinerado bajo ella.
Cinco poemas para fabular la historia - F.E. ®
Leí de Borges la aseveración de que el tiempo real de los noticieros cortó de tajo la creación del mito. De ahí entendí que la poesía debía ser esa interpretadora anti natura, formal y constante, de los hechos que nos quiere vender la historiografía determinista. El mito por lo tanto, es ese misterio básico que todo poema debe insuflar en lo concreto. Presento aquí algunos poemas en los cuales construí mi propia ruta histórica, es decir, la fabulación que me exigían mis propios sueños.
Primer y último canto para Yamahata.
Perdido una mañana, el fotógrafo, en una enmarañada y terrible ciudad, llega por fin a una colina desde donde ve aniquilada, por el resplandor de ayer, a Nagasaki que ahora, se le presenta adelante, interceptándole el paso.
Atemorizado su ánimo, de pronto se le aparece la sombra de Virgilio, que le infunde aliento y promete sacarle de allí, no sin antes hacerle atravesar el reino de los muertos, primero el infierno y después el infierno, hasta que finalmente, en el distante año de 1966, Beatriz (bello nombre de la muerte) le conduce al paraíso.
Echa a andar entonces, cámara en mano y tras Virgilio, va él, Yotsuke Yamahata.
No sé cuánto debo ver
para convencer a todos de este horror.
¡Cuán penoso es referir lo horrible!
¡Cuánto peso para una memoria tan sola!
Nagasaki me contempla con sus ojos calcinados,
me distingue de entre las ruinas,
repite en sus palabras el estallido silencioso
en el cielo de ayer.
Estoy en pie, sobre la colina donde cayó el sol,
un perro me ha seguido, olfateando mi vida,
pero no tengo agua ni milagros
y dejo entonces que se arrime a mi sombra.
Pregunto a quien encuentro acerca de la luz:
¿Cómo fue el brillo de la última sorpresa?
¿Cuál de todas las muertes fue el destello primero?
“¡Pero Ay, Yotsuke! ¿Pero es que no lo sabes?
Fueron los ciegos quienes lo vieron
fueron los sordos quienes escucharon,
una sola palabra fue dicha
y la ceniza pronto se hizo canto.”
Y tu nada me contestas Virgilio,
tu miras hacia abajo
hacia el brazo que se aferra a la idea de un niño,
señalas siluetas en las paredes,
caminas como el humo que se disipa revelando los espectros.
¡Ay cuánto pavor resumirá mi nombre!
¡Cuántos pedazos imposibles de agrupar!
Cuantos muertos posando esta muerte maldita
que se repite y prolonga en cada disparo de mi flash.
Tan lejos de lo que vi está lo que digo...
Lamento en Stalingrado
(1943 grados bajo cero)
Frío.
Es demasiado,
mis recuerdos ya no dan calor,
la nieve ha ido ablandando
el estruendo de los cañones
y me sumerge a pedazos
en un sueño sin voces,
largo,
de blancas metrallas.
Si tan sólo pudiera cantar
tiembla el Volga en los nervios de la estepa,
tiemblan mis manos mientras caen
las noches últimas...
Vienen ellos
entre un galope de escarchas,
sus bocas son inmensas como la ciudad muerta.
Me buscan adentro de las fábricas,
brigada fantasma del Mamayev,
buscan el rastro de mi sangre en coágulos,
pasan sin ojos
pasan
y la nieve es un adios,
un armiño que se pierde
en las tundras de mi sueño.
Historia lega
Fugit irreparabile amor
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
Y al principio, su nombre fue Amor, pero luego, al ser pulida en su espejo, el nombre dio vueltas en el tiempo, deslumbró al mundo y quedó como Roma
ante los ojos inversos de Dios.
Manes y Dioses, harinas y sales, en siglos de triunfo y arcos de tiempo el amor fue desterrado de entre los curites y decirte amor era jugarte la vida, atraerte las Furias, traicionar tu Venus infecunda.
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
De partos múltiples nació Mario, Escipión, César y Sila, y estos, a la vez, adoptaron a estatuas como hijos: Augusto, Tiberio, Trajano y Severo; pero en ninguno de ellos creció el amor, era el mármol quien levantaba ciudades, era el circo quien devastaba ciudades, y de su ombligo y de su grito brotó el Tíber con su mosaico de peces y ruinas multiplicadas… Nadie tuvo piedad por ella: la piedad era hija del amor y de esto, ella, no tenía nada, era seca como una almendra y frívola como patricia en celo.
Dios jugó a lego con Roma,
Roma era lega para Dios.
Logaritmo ruinoso de piedra y granito Roma era un juego de manos y palabras, donde un día hubo imperio ahora reinaban los gatos monarcas, donde los gansos delatan a Breno ahora se estrechaban, orando, los beatos del charter y los curas petrificados. Nada quedó en su sitio, todo fue destruido en la ciudad sitiada. Odoacro fundó el caos y Rómulo una paz soñada. ¡Adiós al Quirinal, adiós a la Curia Hostilia! Si vas a Roma en busca del amor, encontrarás sus ruinas pero jamás la palabra, pero jamás el amor.
Variación lunática
Ad astra per aspera
00.69 GMT
Yo he estado aquí, he visto esto:
en el año 69 se descubre la forma
que tres motores eleven por fin
el obelisco magnífico de Luxor.
En Palenque se declara día nacional
y las estelas arden con fogatas en sus bases.
Pero nadie llega al cielo;
un impulso electromagnético
nos da la visión de un simulacro flotante
que por ser de piedra
caerá un día como un bólido,
en dos fases, sobre el mar de Bering.
En Tunguska, la taiga florece de nuevo
y los esquimales se callan el portento
de una aurora boreal rasgada en su mismo centro.
HRN se olvida de Armstrong y lo suple
con el nombre del primer salvadoreño
en poner un pie sobre la ingrávida Honduras.
La historia, no tiene estación ni frecuencia,
simplemente no existe.
El último P-51 es derribado en Goascorán
y la gente le cae a machetazos
come de sus entrañas
y levanta un altar para el último pájaro a pistones
en hacer la guerra.
00.61 GMT
En el año 61
Gagarin planea blanco sobre la materia oscura;
un guiño de espejos nos muestra el rostro hierático
del primer simio espantado en saltar al vacío.
Todos comen de sus frutos incandescentes.
La Madre Rusia le explica al mundo
a qué sabe lo auténticamente remoto.
00.45 GMT
Von Braun envía naves no tripuladas
a los cráteres de Londres y Amberes.
Las ruinas del universo crecen en tierra
y le dan nombre a quienes viendo el espacio
escupen su venganza, sus V-2, sus Vergeltungswaffe
sobre una humanidad de subsuelos
que busca en las raíces
la más leve muestra del brillo de las estrellas.
00.02 GMT
George Mélies
hace el primer retrato hablado de Julio Verne.
Mimo lunático
Verne se muestra pálido y molesto
con un proyectil incrustado en la mirada.
00-00.00000000001 GMT
Lo eterno
y los constantes viajes a lo bucólico,
a los estanques dormidos, al Mar de la Tranquilidad.
Los desvelos de Ovidio y Virgilio,
el tenue brillo de tus filtros
en los pasillos de Cnosos.
El triángulo que fuiste en las noches de Tanit,
veleidosa Chang- E
o polícroma Mani.
Selene infinita,
Ningal que despide y vela el paso
a los que huyen de noche.
Proyectil de corcho
que ningún mar hundirá,
batiscafo de los deslumbrados,
bandeja donde acumulas caderas,
piernas, manos, cabeza de Coyolxauhqui,
todos los bronces
todas las bramas de Calígula,
el aullido de la loba capitolina
y el esplendor en que doras columnas, capiteles,
el sexo vertido del hombre y la mujer,
todos los placeres, entonces, todas las savias
el ascenso al nombre, a las olas,
al liviano cuerpo transmutado a sudario,
calca de los solos,
bastión,
abismo,
perra.
El olvido
Mi nombre era Elliah T. Svenson
y luché en el 1/4 Batallón del Royal Norfolk Regiment,
Gallipoli, en 1915.
Una inmensa nube me trajo hasta aquí
al mundo de los ecos y el silencio.
De entre el polvo surgían las bayonetas,
los silbatos rompían los tímpanos
y en medio del resollar de la marcha
las órdenes que nos pedían aguantar
hasta la última gota de sueño.
Cierta mañana, la nube vino por nosotros.
La vimos llegar
como un lento amaranto en que la tarde se enreda,
y callamos
aún con las balas royendo la carne,
la vimos
y no supimos que la muerte
disfrazaba con glorias sus olvidos
y con visiones de niño
sus más antiguos pavores.
Yo fui Elliah T. Svenson
y nada tuve que ver con los carros de fuego.
No fui el santo ni el héroe,
desaparecí de los archivos
y hasta del consuelo de una tumba
para un soldado desconocido.
II
Yo fui Macario,
pez nominal atrapado
en la inmensa red del santoral.
Serví –pica y machete en mano-
en las últimas cargas de La Trinidad
y en el primer pelotón de voluntarios Texiguat en el 24.
Morazán brillaba a lo lejos
cuando al recibir la estocada desperté de pronto,
bajo las órdenes de Tosta en El Berrinche.
No pregunté nada,
quién mandaba o quién mataba,
las ametralladoras barrían hasta el nombre,
hombres de poca monta y ocultos bajo el sombrero
servíamos de fondo en los daguerrotipos de los Jefes.
En nuestros huesos apilados
se veían las iniciales que sólo una madre reconoce
en el recuerdo doloroso de su parto y de nuestra partida.
III
Me llamaron Deimones
y poco sabía del odio y de la sangre.
Levanté sarisas y empuñé la espada,
lleno de bronces, empapé el cuero con mi sudor
y le di a la falange un paso más
en su cuadrado andar hacia la muerte.
Poco sabía de historia y geografías
y sin embargo me vi de lleno
inmerso en las márgenes vitales del Ganges
y en las ásperas faldas del Hindo Kush.
A él lo vi de cerca, en una fugaz ocasión,
al girar los hetaroi
en el golpe de mano de Gaugámela.
Y no me impresionó:
su mirada era seca como en todo miedo
y su grito era un hilo de agua
vertida en la candente arena.
Después llegaron las flechas y los ayes,
el hermano perdía a su hermano,
y los nadies recorríamos a pie
el pedregoso camino hacia la estatua sin gloria.
Lo vi arder en Babilonia
sobre una pira de rumores e incertidumbre.
Luego partí con Seleuco y fui prisionero de Ptolomeo.
Entre los escalones del Faro de Alejandría
-desde hace mucho bajo el mar-
los pececillos muerden las huellas
de un esclavo que fue nadie
y que sin embargo levantó la luz
vio la luz y como un insecto
quedó incinerado bajo ella.
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terça-feira, 2 de março de 2010
Blog do Johnny de novo
Indico esse blog de novo:
http://johnnyguimaraes.blogspot.com/
Gostei muito de comparar as críticas ao livro dele de 1996 com a minha. Fiquei orgulhoso de verificar que meu texto convergiu com o do experiente José Afrânio Moreira Duarte.
Wilson: dê uma olhada nesse blog, acho que tem tudo a ver você conhecer o Johnny, ele é policial federal em Varginha.
http://johnnyguimaraes.blogspot.com/
Gostei muito de comparar as críticas ao livro dele de 1996 com a minha. Fiquei orgulhoso de verificar que meu texto convergiu com o do experiente José Afrânio Moreira Duarte.
Wilson: dê uma olhada nesse blog, acho que tem tudo a ver você conhecer o Johnny, ele é policial federal em Varginha.
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poesia
terça-feira, 23 de fevereiro de 2010
Eu & o Fique Sabendo
Depois de moderar minhas reclamações quanto à acusação de que meu antigo blog teria acusações morais a jornalistas e pessoas da cidade, o blog do Jornal Fique Sabendo retirou a postagem a meu respeito. Quando Valmir retirou da primeira vez meu comentário, voltei e fui duro com ele: "não fiz acusações morais, Pinóquio". Somente então ele retirou a postagem.
Não desejei isso, chegar a esse ponto. No entanto, blog tem de ter assuntos polêmicos, debate. Só que o editor não quer debate. Busca só aplausos e elogios. Assim não dá.
Marcadores:
blog,
Fique Sabendo,
Jornal de Negócios,
polêmica
quarta-feira, 13 de janeiro de 2010
Indicação de blog: Zelador Andarilho
Recebi a mensagem abaixo, não sei como, mas gostei dos blogs a que ele se refere.
Primeiro de uma trilogia, o meu blog www.zeladorandarilho.blogspot.com chegou ao THE END em 31.12.2009.
Agora, inicio a segunda parte da trilogia com www.zeladordolago.blogspot.com -
autor dos textos e ilustrações proponho um mergulho no fundo das águas onde habitam batalhas em erupções,
contrastes, estilhaços do infinito, desordens e contradições...
Conheça-o, comente-o e torne-se um seguidor.
Abraços
Rogério Pimentel
PS - Textos serão postados aos domingos, segundas, quartas e sextas-feiras
Um poema muito bom que tirei de um dos blogs acima:
O SOL INVADE UM SONHO TEMPORÃO (O MILAGRE)
Estou branco, sujo na correria dos carros.
Desfio na carne o sabor de bolero.
Ao redor dos fatos extraordinários
os casais de 100 anos sorriem abafados
à procura das pernas do amor.
Estou branco, brumoso na legitimidade do eu.
Abro no dente a brasa do cigarro.
Ao redor dos fatos extraordinários
a velocidade dos carros nas veredas
deixa-me pousar nos faróis.
Estou branco, sórdido na porta do inferno.
Escancaro-me na marginalidade dos braços abertos.
Ao redor dos fatos extraordinários
estabeleço-me próximo às chuvas,
outras vidas dos desejos e orvalhos.
Estou branco, obsceno ao final do bolero.
Pedem os braços uma outra dança.
Ao redor dos fatos extraordinários
os casais imploram mais 100 anos de futuro.
A carne multiplica-se misteriosamente na fome.
Primeiro de uma trilogia, o meu blog www.zeladorandarilho.blogspot.com chegou ao THE END em 31.12.2009.
Agora, inicio a segunda parte da trilogia com www.zeladordolago.blogspot.com -
autor dos textos e ilustrações proponho um mergulho no fundo das águas onde habitam batalhas em erupções,
contrastes, estilhaços do infinito, desordens e contradições...
Conheça-o, comente-o e torne-se um seguidor.
Abraços
Rogério Pimentel
PS - Textos serão postados aos domingos, segundas, quartas e sextas-feiras
Um poema muito bom que tirei de um dos blogs acima:
O SOL INVADE UM SONHO TEMPORÃO (O MILAGRE)
Estou branco, sujo na correria dos carros.
Desfio na carne o sabor de bolero.
Ao redor dos fatos extraordinários
os casais de 100 anos sorriem abafados
à procura das pernas do amor.
Estou branco, brumoso na legitimidade do eu.
Abro no dente a brasa do cigarro.
Ao redor dos fatos extraordinários
a velocidade dos carros nas veredas
deixa-me pousar nos faróis.
Estou branco, sórdido na porta do inferno.
Escancaro-me na marginalidade dos braços abertos.
Ao redor dos fatos extraordinários
estabeleço-me próximo às chuvas,
outras vidas dos desejos e orvalhos.
Estou branco, obsceno ao final do bolero.
Pedem os braços uma outra dança.
Ao redor dos fatos extraordinários
os casais imploram mais 100 anos de futuro.
A carne multiplica-se misteriosamente na fome.
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segunda-feira, 9 de novembro de 2009
Para entender a queda do Muro
PARA (REALMENTE) ENTENDER A QUEDA DO MURO DE BERLIM
Celso Lungaretti
A queda do muro de Berlim, há 20 anos, marcou o fim do chamado socialismo real - a tentativa de construção do socialismo com o descarte de algumas das premissas básicas fixadas por Karl Marx e Friedrich Engels em meados do século 19.
No princípio, os profetas apregoavam uma maré revolucionária que uniria e imantaria os proletários de todos os países, varrendo o planeta. É o que lemos no mais inspirado panfleto político que a humanidade já produziu, o Manifesto do Partido Comunista de 1848.
Levando em conta não só que os trabalhadores do mundo inteiro estavam irmanados pela sina de terem uma substancial parcela da riqueza que geravam (a mais-valia) expropriada pelo patronato, como também que a exploração capitalista havia subjugado países e culturas, submetendo proletários de todos os quadrantes a uma mesma lógica de dominação, os papas do marxismo profetizaram que o socialismo seria igualmente implantado em escala global, começando pelas nações de economias mais avançadas e se estendendo a todas as outras.
O movimento revolucionário foi, pouco a pouco, conquistado pela premissa teórica do internacionalismo, ainda mais depois que a heróica Comuna de Paris foi esmagada em 1871 pela ação conjunta de tropas reacionárias francesas com o invasor alemão. Se as nações capitalistas conjugariam suas forças para sufocar qualquer governo operário que fosse instalado, então os movimentos revolucionários precisariam também transpor fronteiras, para terem alguma chance de êxito – foi a conclusão que se impôs.
A Internacional Socialista, que havia sido fundada sete anos antes, soçobrou principalmente devido ao impacto da derrota da Comuna de Paris sobre o conjunto do movimento operário europeu, mas a semente plantada frutificou na poderosa 2ª Internacional, que aglutinou em 1889 os grandes partidos socialistas consolidados nesse ínterim.
A bonança, entretanto, não fez bem a esses partidos. Muitos dirigentes, deslumbrados com os aparelhos conquistados, passaram a querer mantê-los a qualquer preço, lutando por melhoras para a classe operária do seu próprio país, em detrimento da solidariedade internacional. E teorizaram que o socialismo poderia surgir a partir das reformas realizadas pacificamente e do crescimento numérico da classe média, sem necessidade de uma revolução.
A deflagração da 1ª Guerra Mundial cindiu definitivamente o movimento revolucionário: os reformistas acabaram alinhados com os governos de seus respectivos países no esforço guerreiro, enquanto os marxistas conclamaram os proletários a não dispararem contra seus irmãos de outras nações.
Lênin, Trotsky e Rosa Luxemburgo encabeçaram a reação contra os (por eles designados pejorativamente como) sociais-patriotas e os trâmites para a fundação da 3ª Internacional, contraponto àquela que perdera sua razão de ser.
O socialismo num só país – Em 1917, surgiu a primeira oportunidade de tomada de poder pelos revolucionários desde a Comuna de Paris. E os bolcheviques discutiram apaixonadamente se seria válida uma revolução em país tão atrasado como a Rússia – uma verdadeira heresia à luz dos ensinamentos marxistas.
Para Marx, o socialismo viria distribuir de forma equânime as riquezas geradas sob o capitalismo, de forma que beneficiassem o conjunto da população e não apenas uma minoria privilegiada. Então, ele sempre augurara que a revolução mundial começaria nos países capitalistas mais avançados, como a Inglaterra, a França e a Alemanha.
Um governo revolucionário na Rússia seria obrigado a cumprir tarefas características da fase da acumulação primitiva do capital, como a criação de infra-estrutura básica e a industrialização do país. O justificado temor de alguns dirigentes bolcheviques era de que, assumindo tais encargos, a revolução acabasse se desvirtuando irremediavelmente.
Prevaleceu, entretanto, a posição de que a revolução russa seria o estopim da revolução mundial, começando pela tomada de poder na Alemanha. Então, alavancada e apoiada pelos países socialistas mais prósperos, a construção do socialismo na Rússia se tornaria viável.
Os bolcheviques venceram, mas seus congêneres alemães foram derrotados em 1918. A maré revolucionária acabou sendo contida no mundo inteiro e, como se previa, várias nações capitalistas se coligaram para combater pelas armas o nascente governo revolucionário. Mesmo assim, o gênio militar de Trotsky acabou garantindo, apesar da enorme disparidade de forças, a sobrevivência da URSS.
Quando ficou evidente que a revolução mundial não ocorreria tão cedo, a União Soviética tratou de sair sozinha da armadilha em que se colocara. Devastada e isolada, precisou criar uma economia moderna a partir do nada.
Nenhum ardor revolucionário seria capaz de levar as massas a empreenderem esforços titânicos e a suportarem privações dia após dia, indefinidamente. Só mesmo a força bruta garantiria essa mobilização permanente, sobre-humana, de energias para o desenvolvimento econômico. A tirania stalinista cumpriu esse papel.
A revolução nunca mais voltou aos trilhos marxistas. Como único país dito socialista, a URSS passou a projetar mundialmente seu modelo despótico, que encontrou viva rejeição nas nações avançadas. Nestas, as únicas adesões não se deveram à atuação política dos trabalhadores, mas sim às baionetas do Exército Vermelho, quando da vitória sobre o nazismo.
Tomada autêntica de poder houve em outros países pobres e atrasados, como a China, Cuba, Vietnã e Camboja. E todos repetiram a trajetória para o modelo autoritário do socialismo num só país stalinista.
O grande feito da URSS: derrotar Hitler - Este conseguiu, é verdade, fazer com que a economia da URSS avançasse praticamente um século em duas décadas (as de 1920 e 1930), o que foi fundamental para o país conseguir a proeza praticamente impossível de quebrar a espinha do nazismo.
Pois, é preciso que se diga: Hitler foi vencido na União Soviética, quando comprometeu o melhor da sua máquina de guerra numa derrota contundente.
Ao se retirar, já estava irremediavelmente derrotado. As forças aliadas apenas completaram o serviço.
Mas, a arregimentação autoritária da mão-de-obra só funcionou a contento na etapa da industrialização pesada.
Na segunda metade do século 20, a economia capitalista avançou noutra direção, a da sofisticação tecnológica, da miniaturização, da gestação sôfrega de novas manias consumistas. Informática, biotecnologia, novos materiais, novos processos.
O avanço movido a ganância, com base no talento individual, na pesquisa e na tecnologia, derrotou a economia letárgica da URSS, tornada jurássica da noite para o dia, e sua nomenklatura arrogante que se reservava todos os privilégios.
Comprovava-se a máxima marxista segundo a qual são os países com forças produtivas mais desenvolvidas que determinam os rumos da humanidade.
O bloco soviético desabou como uma fruta apodrecida. Seus países voltaram ao capitalismo e à democracia burguesa.
A China conseguiu manter o sistema político autoritário, à custa de mesclar a economia estatizada com a iniciativa privada. Criou o pior dos mundos possíveis: algo assim como o milagre brasileiro, com a falta de liberdade sendo aceita em função das melhoras materiais proporcionadas pelo regime (e do espírito tradicionalmente submisso dos asiáticos).
Sobrou para os idealistas do século 21 a missão de recolocar a revolução nos trilhos, para que ainda seja cumprindo o sonho original de Marx: não apenas regimes híbridos em países isolados, mas sim o planeta inteiro transformado no “reino da liberdade, para além da necessidade”, em que:
* cada cidadão contribua no limite de suas possibilidades para que todos os cidadãos tenham o suficiente para suprirem as suas necessidades e desenvolverem plenamente as suas potencialidades; e
* o estado desapareça, com os cidadãos assumindo a administração das coisas como parte de sua rotina e a ninguém ocorra administrar os homens, já que eles serão, para sempre, sujeitos da sua própria História.
Engendrarmos uma onda revolucionária capaz de varrer o planeta é tarefa gigantesca? É.
Mas, em relação ao século 19, há uma mudança importante: ela se tornou muito mais necessária, como alternativa à regressão -- talvez, até, à própria aniquilação -- da humanidade.
Pois, salta aos olhos que, mantida a prioridade dos interesses individuais sobre os coletivos, a exaustão de recursos naturais e as catástrofes ecológicas reduzirão drasticamente os contingentes humanos, ou os exterminarão de vez.
A opção a fazermos, como disse Norman O. Brown, agora é entre a vida numa sociedade solidária e harmoniosa, ou a morte sob o capitalismo excludente e predatório.
Postado por Celso Lungaretti às 8:50 AM
Marcadores: capitalismo, Friedrich Engeles, Herbert Marcuse, Joseph Stalin, Karl Marx, Leon Trotsky, Lênin, Norman O. Brown, reformismo, revolução, Rosa Luxemburgo
Celso Lungaretti
A queda do muro de Berlim, há 20 anos, marcou o fim do chamado socialismo real - a tentativa de construção do socialismo com o descarte de algumas das premissas básicas fixadas por Karl Marx e Friedrich Engels em meados do século 19.
No princípio, os profetas apregoavam uma maré revolucionária que uniria e imantaria os proletários de todos os países, varrendo o planeta. É o que lemos no mais inspirado panfleto político que a humanidade já produziu, o Manifesto do Partido Comunista de 1848.
Levando em conta não só que os trabalhadores do mundo inteiro estavam irmanados pela sina de terem uma substancial parcela da riqueza que geravam (a mais-valia) expropriada pelo patronato, como também que a exploração capitalista havia subjugado países e culturas, submetendo proletários de todos os quadrantes a uma mesma lógica de dominação, os papas do marxismo profetizaram que o socialismo seria igualmente implantado em escala global, começando pelas nações de economias mais avançadas e se estendendo a todas as outras.
O movimento revolucionário foi, pouco a pouco, conquistado pela premissa teórica do internacionalismo, ainda mais depois que a heróica Comuna de Paris foi esmagada em 1871 pela ação conjunta de tropas reacionárias francesas com o invasor alemão. Se as nações capitalistas conjugariam suas forças para sufocar qualquer governo operário que fosse instalado, então os movimentos revolucionários precisariam também transpor fronteiras, para terem alguma chance de êxito – foi a conclusão que se impôs.
A Internacional Socialista, que havia sido fundada sete anos antes, soçobrou principalmente devido ao impacto da derrota da Comuna de Paris sobre o conjunto do movimento operário europeu, mas a semente plantada frutificou na poderosa 2ª Internacional, que aglutinou em 1889 os grandes partidos socialistas consolidados nesse ínterim.
A bonança, entretanto, não fez bem a esses partidos. Muitos dirigentes, deslumbrados com os aparelhos conquistados, passaram a querer mantê-los a qualquer preço, lutando por melhoras para a classe operária do seu próprio país, em detrimento da solidariedade internacional. E teorizaram que o socialismo poderia surgir a partir das reformas realizadas pacificamente e do crescimento numérico da classe média, sem necessidade de uma revolução.
A deflagração da 1ª Guerra Mundial cindiu definitivamente o movimento revolucionário: os reformistas acabaram alinhados com os governos de seus respectivos países no esforço guerreiro, enquanto os marxistas conclamaram os proletários a não dispararem contra seus irmãos de outras nações.
Lênin, Trotsky e Rosa Luxemburgo encabeçaram a reação contra os (por eles designados pejorativamente como) sociais-patriotas e os trâmites para a fundação da 3ª Internacional, contraponto àquela que perdera sua razão de ser.
O socialismo num só país – Em 1917, surgiu a primeira oportunidade de tomada de poder pelos revolucionários desde a Comuna de Paris. E os bolcheviques discutiram apaixonadamente se seria válida uma revolução em país tão atrasado como a Rússia – uma verdadeira heresia à luz dos ensinamentos marxistas.
Para Marx, o socialismo viria distribuir de forma equânime as riquezas geradas sob o capitalismo, de forma que beneficiassem o conjunto da população e não apenas uma minoria privilegiada. Então, ele sempre augurara que a revolução mundial começaria nos países capitalistas mais avançados, como a Inglaterra, a França e a Alemanha.
Um governo revolucionário na Rússia seria obrigado a cumprir tarefas características da fase da acumulação primitiva do capital, como a criação de infra-estrutura básica e a industrialização do país. O justificado temor de alguns dirigentes bolcheviques era de que, assumindo tais encargos, a revolução acabasse se desvirtuando irremediavelmente.
Prevaleceu, entretanto, a posição de que a revolução russa seria o estopim da revolução mundial, começando pela tomada de poder na Alemanha. Então, alavancada e apoiada pelos países socialistas mais prósperos, a construção do socialismo na Rússia se tornaria viável.
Os bolcheviques venceram, mas seus congêneres alemães foram derrotados em 1918. A maré revolucionária acabou sendo contida no mundo inteiro e, como se previa, várias nações capitalistas se coligaram para combater pelas armas o nascente governo revolucionário. Mesmo assim, o gênio militar de Trotsky acabou garantindo, apesar da enorme disparidade de forças, a sobrevivência da URSS.
Quando ficou evidente que a revolução mundial não ocorreria tão cedo, a União Soviética tratou de sair sozinha da armadilha em que se colocara. Devastada e isolada, precisou criar uma economia moderna a partir do nada.
Nenhum ardor revolucionário seria capaz de levar as massas a empreenderem esforços titânicos e a suportarem privações dia após dia, indefinidamente. Só mesmo a força bruta garantiria essa mobilização permanente, sobre-humana, de energias para o desenvolvimento econômico. A tirania stalinista cumpriu esse papel.
A revolução nunca mais voltou aos trilhos marxistas. Como único país dito socialista, a URSS passou a projetar mundialmente seu modelo despótico, que encontrou viva rejeição nas nações avançadas. Nestas, as únicas adesões não se deveram à atuação política dos trabalhadores, mas sim às baionetas do Exército Vermelho, quando da vitória sobre o nazismo.
Tomada autêntica de poder houve em outros países pobres e atrasados, como a China, Cuba, Vietnã e Camboja. E todos repetiram a trajetória para o modelo autoritário do socialismo num só país stalinista.
O grande feito da URSS: derrotar Hitler - Este conseguiu, é verdade, fazer com que a economia da URSS avançasse praticamente um século em duas décadas (as de 1920 e 1930), o que foi fundamental para o país conseguir a proeza praticamente impossível de quebrar a espinha do nazismo.
Pois, é preciso que se diga: Hitler foi vencido na União Soviética, quando comprometeu o melhor da sua máquina de guerra numa derrota contundente.
Ao se retirar, já estava irremediavelmente derrotado. As forças aliadas apenas completaram o serviço.
Mas, a arregimentação autoritária da mão-de-obra só funcionou a contento na etapa da industrialização pesada.
Na segunda metade do século 20, a economia capitalista avançou noutra direção, a da sofisticação tecnológica, da miniaturização, da gestação sôfrega de novas manias consumistas. Informática, biotecnologia, novos materiais, novos processos.
O avanço movido a ganância, com base no talento individual, na pesquisa e na tecnologia, derrotou a economia letárgica da URSS, tornada jurássica da noite para o dia, e sua nomenklatura arrogante que se reservava todos os privilégios.
Comprovava-se a máxima marxista segundo a qual são os países com forças produtivas mais desenvolvidas que determinam os rumos da humanidade.
O bloco soviético desabou como uma fruta apodrecida. Seus países voltaram ao capitalismo e à democracia burguesa.
A China conseguiu manter o sistema político autoritário, à custa de mesclar a economia estatizada com a iniciativa privada. Criou o pior dos mundos possíveis: algo assim como o milagre brasileiro, com a falta de liberdade sendo aceita em função das melhoras materiais proporcionadas pelo regime (e do espírito tradicionalmente submisso dos asiáticos).
Sobrou para os idealistas do século 21 a missão de recolocar a revolução nos trilhos, para que ainda seja cumprindo o sonho original de Marx: não apenas regimes híbridos em países isolados, mas sim o planeta inteiro transformado no “reino da liberdade, para além da necessidade”, em que:
* cada cidadão contribua no limite de suas possibilidades para que todos os cidadãos tenham o suficiente para suprirem as suas necessidades e desenvolverem plenamente as suas potencialidades; e
* o estado desapareça, com os cidadãos assumindo a administração das coisas como parte de sua rotina e a ninguém ocorra administrar os homens, já que eles serão, para sempre, sujeitos da sua própria História.
Engendrarmos uma onda revolucionária capaz de varrer o planeta é tarefa gigantesca? É.
Mas, em relação ao século 19, há uma mudança importante: ela se tornou muito mais necessária, como alternativa à regressão -- talvez, até, à própria aniquilação -- da humanidade.
Pois, salta aos olhos que, mantida a prioridade dos interesses individuais sobre os coletivos, a exaustão de recursos naturais e as catástrofes ecológicas reduzirão drasticamente os contingentes humanos, ou os exterminarão de vez.
A opção a fazermos, como disse Norman O. Brown, agora é entre a vida numa sociedade solidária e harmoniosa, ou a morte sob o capitalismo excludente e predatório.
Postado por Celso Lungaretti às 8:50 AM
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sábado, 7 de novembro de 2009
Blogagem coletiva de Reinaldo Azevedo e Yoani
Pessoal, estou participando do movimentado blog geração y, da Yoani Sánchez. Não há como imaginar que esse blog seja sustentando só por uma pessoa. Uma equipe traduz os posts em vários idiomas e existem comentadores fixos, por exemplo, em português do Brasil, que se ocupam, no tom de Reinaldo Azevedo e Olavo de Carvalho, em denegrir Lula, Chávez, Raul e outros e qualquer coisa que de longe cheire a socialismo. Uma equipe ou organização parece estar por trás do blog. Quem será? Pelo anticomunismo furibundo, fiquei temendo ser a CIA. Vejam só a classe do comentador "Dirceu":
Para um esquerdopata, que trata um assassino da família castro ruz de maneira íntima em seu blog, eu (Yoani também) só poderia ser financiado, não posso ter opinião própria fundada em fatos, tenho que estar a serviço dos “yankees imperialista”.
Isto demonstra claramente a mente doentia que eles possuem, junto com a inveja, mesmo porque você sinistro não precisava indicar o blog da Yoani, vez que seu blog é inexpressivo. O fez para chamar atenção à sua insignificância e a de seu blog, citando no post o porco assassino fedido che em filme de Roliude, porque aí sim tem valor os “yankees” do tipo abestalhado Oliver Stone, Seann Penn, Sodenbergh, et caterva.
Continua o conselho:
Vai se roçar nas ostras admirador do fedido fundador da rolha socialista na ilha prisão.
E pior é que, para mim, Lula é neoliberalismo com cesta básica para o povão; FHC era o neoliberalismo puro. Só isso...
Para um esquerdopata, que trata um assassino da família castro ruz de maneira íntima em seu blog, eu (Yoani também) só poderia ser financiado, não posso ter opinião própria fundada em fatos, tenho que estar a serviço dos “yankees imperialista”.
Isto demonstra claramente a mente doentia que eles possuem, junto com a inveja, mesmo porque você sinistro não precisava indicar o blog da Yoani, vez que seu blog é inexpressivo. O fez para chamar atenção à sua insignificância e a de seu blog, citando no post o porco assassino fedido che em filme de Roliude, porque aí sim tem valor os “yankees” do tipo abestalhado Oliver Stone, Seann Penn, Sodenbergh, et caterva.
Continua o conselho:
Vai se roçar nas ostras admirador do fedido fundador da rolha socialista na ilha prisão.
E pior é que, para mim, Lula é neoliberalismo com cesta básica para o povão; FHC era o neoliberalismo puro. Só isso...
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quinta-feira, 5 de novembro de 2009
Do blog Cena dois
4 de novembro de 2009
Samuel Beckett
Imagem interessante postada no blog
http://imagesvisions.blogspot.com/ de hoje.
A foto é de Vik Muniz.
“Abro a porta da cela e vou. Estou tão curvado que só vejo meus pés, se abro os olhos, e entre minhas pernas um punhado de poeira escura. Me digo que a terra está apagada, ainda que nunca a tenha visto acesa. (pausa) É assim mesmo (pausa) Quando eu cair, chorarei de felicidade”, disse Clov.
O trecho acima é do livro Fim de Partida, escrito pelo genial Samuel Beckett (1906-1989). Nascido na Irlanda, Samuel Beckett foi dos mais influentes escritores do século 20, com uma obra que inclui contos, poesia, romances como Malone Morre e peças como Esperando Godot. Recebeu o Nobel de literatura em 1969.
Os pais de Samuel Barclay Beckett eram protestantes. Ele estudou na escola real em Enniskillen (onde Oscar Wilde também havia freqüentado). Foi lá que começou a aprender o francês, uma das suas línguas preferidas.
Excelente atleta, Beckett foi jogador de tênis e boxeador. Embora gostasse de esportes, sua atenção estava voltada aos estudos acadêmicos. Aos 17 anos entrou para a faculdade, e se aprofundou nos textos literários.
Outro assunto que influenciou o escritor, nos seus tempos de estudante, foi o cinema de comédia de Buster Keaton e Charlie Chaplin. Depois que se formou, Beckett viajou a Paris onde se encontrou com James Joyce, que se tornaria a sua maior referência literária.
Além de ter sido um dos assistentes favoritos de Joyce, Beckett construiu uma sólida amizade com o autor de Ulisses. Inspirado pelo círculo literário, de uma Paris repleta de novidades culturais, Beckett tinha encontrado nele a sua falange, que orientaria toda a sua obra.
Forçado a voltar a Irlanda, para resolver problemas pessoais, Beckett retorna a Paris em 1932, e por lá fica um bom tempo escrevendo novelas, contos e poesias. Nessa época, o escritor desenvolve uma voz própria e saí das sombras de Joyce para dar o seu próprio salto.
Por um bom período o escritor chegou a residir em Londres, com a intenção de fazer dinheiro, mas foi em Paris que ele se estabeleceu. Quando a cidade foi invadida em 1941, Beckett e Suzanne (sua esposa) juntaram a resistência e foram obrigados a refugiar-se no sul da França.
Com o fim da guerra Beckett se estabelece com Suzanne em Paris. A partir daí foram centenas de trabalhos realizados. Em 1977 começou a ter problemas de saúde, prejudicando sua produção literária.
No dia 17 de julho de 1989, ele perde Suzanne. O baque foi grande. No mesmo ano, 22 de dezembro, Beckett morre, deixando uma obra de inigualável valor artístico.
O livro Fim de Partida (Cosac & Naify; 176 páginas, R$30,00) peça em um ato, tem quatro personagens. Eles “giram em falso” entre a vida e a morte, numa decadência cinzenta que se arrasta sem chegar ao fim.
O livro é elegante, com capa dura e sobrecapa. A tradução é de Fábio de Souza Andrade. O interessante do Fim de Partida é a habilidade do texto que, ao estabelecer um jogo que contempla um desfecho “fácil”, com vitoriosos ou derrotados, se apóia em repetições e diálogos fragmentados.
Comungo com o escritor Bernardo Carvalho quando diz que gosta de literatura, e não de escritores. Abro uma exceção apenas para a figura de Beckett. Todas as suas fotos me dão a impressão de que ele era cauteloso na legitimidade humana. Me parecia extremamente honesto e franco, sem as afetações que sujam as auras de muitos escritores por aí.
Postado por Luiz Penna às 08:15
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Samuel Beckett
Imagem interessante postada no blog
http://imagesvisions.blogspot.com/ de hoje.
A foto é de Vik Muniz.
“Abro a porta da cela e vou. Estou tão curvado que só vejo meus pés, se abro os olhos, e entre minhas pernas um punhado de poeira escura. Me digo que a terra está apagada, ainda que nunca a tenha visto acesa. (pausa) É assim mesmo (pausa) Quando eu cair, chorarei de felicidade”, disse Clov.
O trecho acima é do livro Fim de Partida, escrito pelo genial Samuel Beckett (1906-1989). Nascido na Irlanda, Samuel Beckett foi dos mais influentes escritores do século 20, com uma obra que inclui contos, poesia, romances como Malone Morre e peças como Esperando Godot. Recebeu o Nobel de literatura em 1969.
Os pais de Samuel Barclay Beckett eram protestantes. Ele estudou na escola real em Enniskillen (onde Oscar Wilde também havia freqüentado). Foi lá que começou a aprender o francês, uma das suas línguas preferidas.
Excelente atleta, Beckett foi jogador de tênis e boxeador. Embora gostasse de esportes, sua atenção estava voltada aos estudos acadêmicos. Aos 17 anos entrou para a faculdade, e se aprofundou nos textos literários.
Outro assunto que influenciou o escritor, nos seus tempos de estudante, foi o cinema de comédia de Buster Keaton e Charlie Chaplin. Depois que se formou, Beckett viajou a Paris onde se encontrou com James Joyce, que se tornaria a sua maior referência literária.
Além de ter sido um dos assistentes favoritos de Joyce, Beckett construiu uma sólida amizade com o autor de Ulisses. Inspirado pelo círculo literário, de uma Paris repleta de novidades culturais, Beckett tinha encontrado nele a sua falange, que orientaria toda a sua obra.
Forçado a voltar a Irlanda, para resolver problemas pessoais, Beckett retorna a Paris em 1932, e por lá fica um bom tempo escrevendo novelas, contos e poesias. Nessa época, o escritor desenvolve uma voz própria e saí das sombras de Joyce para dar o seu próprio salto.
Por um bom período o escritor chegou a residir em Londres, com a intenção de fazer dinheiro, mas foi em Paris que ele se estabeleceu. Quando a cidade foi invadida em 1941, Beckett e Suzanne (sua esposa) juntaram a resistência e foram obrigados a refugiar-se no sul da França.
Com o fim da guerra Beckett se estabelece com Suzanne em Paris. A partir daí foram centenas de trabalhos realizados. Em 1977 começou a ter problemas de saúde, prejudicando sua produção literária.
No dia 17 de julho de 1989, ele perde Suzanne. O baque foi grande. No mesmo ano, 22 de dezembro, Beckett morre, deixando uma obra de inigualável valor artístico.
O livro Fim de Partida (Cosac & Naify; 176 páginas, R$30,00) peça em um ato, tem quatro personagens. Eles “giram em falso” entre a vida e a morte, numa decadência cinzenta que se arrasta sem chegar ao fim.
O livro é elegante, com capa dura e sobrecapa. A tradução é de Fábio de Souza Andrade. O interessante do Fim de Partida é a habilidade do texto que, ao estabelecer um jogo que contempla um desfecho “fácil”, com vitoriosos ou derrotados, se apóia em repetições e diálogos fragmentados.
Comungo com o escritor Bernardo Carvalho quando diz que gosta de literatura, e não de escritores. Abro uma exceção apenas para a figura de Beckett. Todas as suas fotos me dão a impressão de que ele era cauteloso na legitimidade humana. Me parecia extremamente honesto e franco, sem as afetações que sujam as auras de muitos escritores por aí.
Postado por Luiz Penna às 08:15
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segunda-feira, 19 de outubro de 2009
Tudo azulzim...
Um blog muito bom que descobri: belas crônicas, fotos, etc.
http://tudoazulzim.blogspot.com/
E um texto que a dona do blog, professora, me pediu:
NOTAS SOBRE O TEATRO DE GERALD THOMAS: UMA DESCIDA NO MAELSTROM
Lúcio Emílio do Espírito Santo Júnior
RESUMO
Esse texto busca analisar a trilogia do encenador Gerald Thomas iniciada com Rainha Mentira (Queen Liar), Terra em Trânsito e, no ano de 2008, enriquecida pela blognovela O cão que atacava mulheres: Kepler, the dog, além de Bate-Man, monólogo escrito para Marcelo Olinto. O texto analisa a virada autoral de Thomas, que passa a partir desses textos a fazer relatos marcadamente autorais, senão autobiográficos, como mais uma forma de cultivar a sua assinatura enquanto autor, mais próximo, segundo ele, do cinema de Glauber Rocha do que realizam, no teatro, os chamados diretores teatrais, um título que Thomas desconsidera e julga figurativo. A partir do texto original da blognovela, escrito por Gerald em seu blog, desvendamos um pouco de seu processo criativo: ao encenar a peça, Gerald Thomas substituiu um texto mais lúdico e coloquial, ligado ao cotidiano, por imagens derivadas do inconsciente inspiradas nos símbolos que criava Beckett.
Palavras-chave: dramaturgia, Terra em Trânsito, Queen Liar, Kepler, Gerald Thomas, blognovela, teatro, Ópera Seca, pós-modernismo
ABSTRACT
This text analyzes the works of the encenador Gerald Thomas initiated with Rainha Mentira (Queen Liar), Land in Transit and, in the year of 2008, his blog´s soap opera named The dog that attacked women: Kepler, the dog. The text analyzes the authorial turn of Thomas, who pass from drama director from authorial and autobiographical dramasas as a form to cultivate its signature while author, next according to it of the cinema of Glauber Rocha of what of they carry through it, in the theater, his teatrical managing calls, a heading that Thomas disrespects and judges figurative. From the original text of blog´s soap opera, congregated in his blog,this work unmasks a little of his creative process: at the moment where it was staged, Gerald Thomas substituted a text more ordinary and playful for images derived from the unconscious one inhaled in the symbols that Beckett created.
Key-words: Land in Transit, Queen Liar, Kepler, Gerald Thomas, blognovela, theater, Dry Opera, post-modernism
INTRODUÇÃO
O início dos anos 80 foi o momento em que o Brasil reconheceu o talento de encenador de Gerald Thomas. O contexto em que sua peça Quatro Vezes Beckett fez sucesso era de redemocratização e abandono das preocupações políticas dos anos 70. A partir de então, transformou-se o contexto em que boa parte dos diretores e dramaturgos brasileiros tinham sido primordialmente brechtianos, mas vivia-se um momento em que Brecht foi perdendo, paulatinamente, sua influência.
Essa pesquisa visa estudar e verificar uma importante mudança ocorrida na carreira do encenador Gerald Thomas desde meados dos anos 2000: Gerald decidiu não mais encenar textos de outros autores, esforçando-se agora por encenar e redigir sua própria dramaturgia. A primeira experiência dessa nova fase foram as peças Terra em Trânsito e Rainha Mentira (Queen Liar). Ele se aproxima, portanto, do traço autoral de um Glauber Rocha, que sempre escrevia e dirigia seus filmes, tendo todos eles a sua marca, sua assinatura autoral e muitas vezes, como em Idade da Terra, sua presença física e voz propriamente ditas.
Nos anos 90, o crítico David George Thomas já considerava Thomas como mais do que um diretor e sim um encenador surgido a partir de uma visão original das obras de Beckett nos anos 80. É comum nas peças de Thomas a interferência da própria voz do encenador. Por exemplo, em Queen Liar, a narrativa autobiográfica apresenta constantemente a voz do encenador que faz intervenções narrativas. Essa voz narrava, por exemplo, que a personagem da avó se assemelhava a uma personagem do pintor Otto Dix (expressionista alemão que protestou contra guerra pintando os mutilados e mortos). Já Terra em Trânsito, que Gerald considera a mesma peça, refere-se claramente a Terra em Transe, filme de Glauber Rocha: cita-se, por exemplo, o apaixonado por ópera Paulo Francis, enquanto Terra em Transe era o epitáfio do jornalista e poeta ficcional Paulo Martins. Em Terra em Trânsito, uma cantora de ópera se vê presa em seu camarim e entra num processo de enlouquecimento enquanto escuta um discurso reacionário Francis no rádio e desespera-se enquanto alimenta um ganso para fazer foie gras. Trata-se de uma oscilação freqüente na obra de Gerald Thomas e que talvez seja o drama do artista contemporâneo: ele oscila entre um ceticismo neopositivista (“nada prova nada”) e o desespero ultra-romântico (a diva em crise na carreira, Hamlet/Paulo Martins).
Recentemente, em 2008, Thomas realizou mais uma peça que continua essa trilogia iniciada com Terra em Trânsito: a peça O cão que atacava mulheres, Kepler, the dog, inspirada numa blognovela realizada por Gerald Thomas juntamente com os participantes de seu blog no provedor Ig, internet gratuita. Nela, um cão de nome Kepler perambula entre um cenário de pesadelo que, dentre muitos outros personagens, vê imagens que fazem lembrar as torturas nas bases norte-americanas de Abu Ghraib e Guantánamo, assim como um executivo suicida, a busca do Santo Graal, etc. O cão (Fabiana Gigli) está na coleira do personagem do executivo (Duda Mendonça), mas faz referência à imagem, muito recorrente na mídia, da militar norte-americana no Iraque trazendo um prisioneiro iraquiano na coleira, imagem associada a uma mulher dominadora da imagética sadomasoquista, a dominatrix. A dramaturgia de Thomas possui, portanto, referência a um universo de referências muito particular e caro ao autor: Living Theatre, Stoppard, Orwell, Kafka, Kantor, Duchamp, Haroldo de Campos, Oswald de Andrade, às montagens do próprio Gerald Thomas, entre outros.
Gerald Thomas é um enigma, mas não um enigma vazio, como alguns querem que seja a arte contemporânea. Para o crítico norte-americano David George, Gerald realiza uma antropofagia wagneriana. Enquanto isso, no Brasil, devido à sua posição polêmica dentro do teatro brasileiro, é acusado de fazer imperialismo cultural. David George estabelece uma linha de influências para Gerald Thomas no Brasil: José Celso Martinez Corrêa e Antunes Filho, assim como a dramaturgia de Nelson Rodrigues, em homenagem a quem Thomas dirigiu uma peça chamada “Asfaltaram o Beijo”. Ele seria o principal divulgador do pós-modernismo no teatro brasileiro. Mas Thomas vai bem além e é um agitador cultural que exerce muito bem o seu talento para o jornalismo, diferente da tendência de Beckett para escrever poemas e prosa mais extensa. Thomas, por sua vez, é show man: atua como colunista em veículos como Ig, Folha Ilustrada, comentarista no prestigiado programa de TV Manhattan Connection, etc.
2 DE BECKETT A KEPLER
Gerald Thomas começou como seguidor de Beckett e com ele ainda possui muito em comum. Em primeiro, ele surge de uma revisão de Brecht e do teatro político, que terminava não alcançando as camadas populares a quem dirigia seu discurso. Além dessa inabilidade de chegar às camadas populares, e diretamente associada a ela, uma outra dificuldade tem caracterizado uma considerável parcela do teatro dito político: a predominância do compromisso didático em detrimento das preocupações estéticas. Isto é, um desequilíbrio entre conteúdo e forma. Apesar de Brecht enfatizar por diversas vezes em seus escritos teóricos que o teatro engajado não precisaria, nem deveria, excluir o caráter de diversão próprio a essa arte, muitos dos seus seguidores incorreram nesse erro e construíram espetáculos sisudos, excessivamente intelectualizados e de pouco apelo para o grande público. Como explica o encenador Gerald Thomas:
Pouco foi dito sobre isso, mas o efeito de distanciamento, de esfriamento, de racionalização e de didatismo sobre uma arte que é, essencialmente, fabulesca e metafórica começou como uma saudável doença de alerta e acabou por se tornar seu vírus mais fatal (THOMAS apud GUINSBURG et al FERNANDES, 1996, p. 37).
Diante desses impasses, em um mundo pós-muro de Berlin, o teatro político tem sido impelido a redimensionar seus objetivos e suas práticas. O próprio trabalho de Boal evidencia uma busca por um novo posicionamento teórico. Quando comparado ao Teatro político de Piscator, por exemplo, percebe-se que no Teatro do Oprimido já não há um enfoque explícito na questão da luta de classes. A "revolução" de que fala Boal pode também significar uma radical modificação interna do indivíduo-espectador. É a partir da necessidade desse tipo de modificação e da dificuldade em obtê-la é que está o traço que podemos notar em Beckett e Thomas.
Para explicar Thomas, tratemos de Beckett. Em The Rhetoric of Fiction, Wayne Booth utilizou, numa edição revista, a novela Company de Beckett como exemplo de sua teoria do autor implícito, aplicando-a em uma narrativa contemporânea. Como definir Beckett e aquilo que pode ter influenciado Thomas? Tomemos as palavras de Peter Brook:
Talvez a escrita mais intensa e pessoal de nosso tempo venha de Samuel Beckett. As peças de Beckett são símbolos no sentido exato da palavra. Um símbolo falso é mole e vago; um símbolo verdadeiro é duro e claro. Quando dizemos “simbólico” frequentemente queremos dizer enfadonhamente obscuro; já um símbolo verdadeiro é específico, é a única forma de expor uma certa verdade. Os dois homens esperando ao lado de uma árvore seca, o homem gravando a si próprio em fitas, os dois homens escravos de uma torre, a mulher enterrada na areia até a cintura, os pais em latas de lixo, as três cabeças nos vasos: essas são invenções puras, imagens frescas, agudamente definidas – e funcionam no palco como objetos. São máquinas teatrais. As pessoas sorriem delas, mas elas ficam firmes: são à prova de crítica. Não chegaremos a lugar nenhum se esperamos que elas nos sejam explicadas, entretanto cada uma tem uma relação conosco que não podemos negar. Se o aceitamos, o símbolo nos provoca uma grande e pensativa exclamação (BROOK, 1970, p. 57).
Assim como em Company não é preciso explicar de onde vem a voz que sugere ao personagem que imagine, Gerald busca símbolos que não precisem ser explicados nem entendidos racionalmente e sim imagens que falem direto ao inconsciente, símbolos tais como Beckett fazia: e símbolos duros. São símbolos poderosos presentes nas peças recentes de Thomas: em Queen Liar, a figura distorcida da avó que era como um personagem de Otto Dix, a cantora de ópera em crise e seu ganso em vias de virar foie gras, um cão em forma de mulher que diz um texto filosófico enquanto defeca no chão.
Os pontos em comum entre Gerald Thomas e Samuel Beckett ficam mais claros quando se avalia alguns pontos da análise de Wayne Booth a respeito da novela Company. Em alguns momentos, é como se ele estivesse falando da blognovela que ora estamos estudando. O texto de Beckett é um “texto para nada”. Essa forma de limitar artificialmente as palavras imaginadas para fazer um quebra-cabeças minimalista é presente nas peças de Thomas e de Beckett. Para se ter uma idéia, Company inicia-se com a enigmática frase: “Uma voz chega para alguém no escuro. Imagine” (BECKETT apud BOOTH, 1983, p. 445). Tanto o mestre quanto o herdeiro tratam da falta de sentido do mundo. O mundo, em seus textos, é predestinado a ser sentido, e o recurso de escrever sobre ele, “para ter companhia”, está destinado ao fracasso insignificante, produzindo não mais do que falência supérflua e miséria. Ambos buscam estabelecer um equilíbrio delicado entre criar situações que complexas e que geram perplexidade, mas que não são tão confusas ao ponto de não despertarem a curiosidade e demandarem uma interpretação.
3 A VOZ AUTORAL EM KEPLER, O CÃO QUE ATACAVA MULHERES
Gerald Thomas foi uma voz autoral desde o início de sua carreira. Sua interpretação das peças de Beckett já tinha uma assinatura própria. “Julian Beck morreu durante uma voz que ele ouviu, gravada por ele mesmo e ouvida por ele próprio” (THOMAS, 2008), referência em off que entra com a voz de Gerald Thomas quando o personagem de Duda Mamberti está em cena na peça O cão que atacava mulheres: Kepler, the dog e que refere-se à montagem de um texto que Beckett escreveu para Julian Beck quando este já era paciente terminal de câncer (All Strange Away e The Time). O texto em off, surgido devido a exigências extra-artísticas em Nova York, onde, para se apresentar uma peça é preciso depositar pagar um valor vultoso para o ator a título de seguro, encarecendo a peça e obrigando o diretor a ter a voz do ator ao invés de tê-lo presente, passou a ser usado de forma muito inovado como recurso anti-realista por Thomas, num lance verdadeiramente antropofágico, revertendo o desfavorável em favorável e fazendo da voz em off um de suas marcas autorais mais importantes.
Tanto nas peças que ele escreve quanto nos textos que dirige, Thomas busca acionar uma simbólica profunda, vinda do inconsciente, criando símbolos e imagens fortes como os que estão presentes na obra de Samuel Beckett. Quando Thomas surgiu, o Brasil vivia um momento onde se buscava novos caminhos para a dramaturgia. A problemática coletiva dava lugar às questões individuais. O trabalho de Thomas não se filia nem a Brecht nem a Stanislavski, nem segue ortodoxamente os métodos nem de um nem de outro. Thomas recusa tanto o método épico-didático de Brecht (não transmite conteúdos socialistas, prefere polemizar com a esquerda) quanto o método de Stanislavski, que segundo ele não seria apropriado para o teatro (pois o teatro exigiria principalmente projeção de voz), adequando-se melhor ao cinema (a propósito, ele cita o Actor´s Studio, estúdio norte-americano que aplicou amplamente em Hollywood o método do russo, ajudando a criar atores tais como Marlon Brando). Marcelo Alcântara comentou a respeito na revista A Bacante:
(...) Muitas das características do que se vê na tela são facilmente relacionáveis ao nome e à obra de Thomas - uma montagem textocêntrica e sem linearidade, entrecortada por milhares de assuntos, embalada por imagens construídas com rigor, muita fumaça, jogos de luzes e narração em off dublando personagens em cena. Nada disso é novidade, mas aqui há muito mais do que a tradicional relação forma/conteúdo: ganha força também o fator meio (nã-não, não o centro, tô falando do medium por onde o espetáculo é transmitido) - e as influências que esse meio impõe à forma do que é produzido (...). Mas diferente dos roteiros escritos por Samuel Beckett para a TV, por exemplo, Kepler, The Dog visto pela mediação da tela do monitor não passa de um espetáculo concebido para o palco - ainda que sua realização visasse a transmissão pela rede. Por mais que tenha surgido a partir da internet e só faça sentido considerando este fato, o primeiro capítulo da blognovela de Gerald Thomas ainda é teatro filmado, com toda a importância que o registro da efemeridade do palco pode ter, mas também com toda a precariedade e ingenuidade de câmeras que tentam dar conta de captar o todo de forma documental e com pouco diálogo com o meio a que a obra se destina (vale ressaltar que a busca por atores via internet, por meio do envio de vídeos, dialoga muito mais com o meio do que o próprio resultado final). Para os próximos episódios desta blognovela, fica a expectativa de que além da inspiração na atividade colaborativa, haja maiores apropriações (e por que não questionamentos e subversões?) da tecnologia como forma de transformação (e não apenas reprodução/propagação) da produção teatral - além da torcida para que o produto final transmitido pelos precários serviços de banda larga brasileiros seja minimamente estimulante a quem não está num teatro escuro cheio de fumaça (e cujos focos de atenção não estão condicionados a seguir os movimentos de luz e som que ocorrem em cena) (ALCANTARA, 2008).
Divergimos da crítica acima no seguinte ponto: a blognovela foi concebida primeiramente como texto literário, somente depois foi encenada, de maneira totalmente repensada, pela Companhia Ópera Seca e pensado simultaneamente para ser encenado no palco e transmitido pela internet. Diz Mau Fonseca a respeito do “teatrocinema da blognovela”, quase como se estivesse respondendo às críticas acima elencadas por Marcelo Alcântara:
O teatro visto por uma tela pequena de computador sujeito às entropias da exibição intra-pessoal (algo que não seja pessoalmente) é como a comunicação diária no blog. Todos são íntimos distantes, sujeitados a uma entropia diária - a mensagem é verdadeira, mas os formatos criados (os nicknames e as técnicas) dentro do blog são falsescas, tal como na produção cinematográfica. Então, por associação, o blog é como o cinema também, mesmo parecendo absurdo. A encenação da peça ao vivo, como num ensaio, era teatro apenas pra quem estava na platéia, o cenário, elenco, a fumaça, a interação e o peso dos corpos e sons. Ao público em casa, era também uma peça teatralizada porque não houvera montagem anterior, seguia-se obviamente um roteiro, mas a montagem era ao vivo (o plen-air impressionista) - portanto teatro. E a criação foi com base teatral, Gerald é homem do teatro, e sua cia. faz parte do universo teatral. Nossa visão se deslocava na tela do computador procurando pontos focais, sendo que em determinados momentos a tela se escurecia, um corte cinematográfico e teatral. É o teatrocinema ou nenhum dos dois...de repente não é uma coisa ou outra, é apenas uma obra audiovisual, como uma vídeo arte ou "Performance Body Art" que poderia ser reproduzida em paredes de museus ou encostas de morros, laterais de prédios, projetada por grandes projetores interferindo na paisagem, o que aumentaria a percepção e ao mesmo tempo provocaria outras interferências perceptivas em relação ao tema. Afinal, as idéias ou conceitos eram mais importantes que o formato, o que deveria ser relevante era a mensagem. E foi justamente a mensagem que prevaleceu e sendo assim funcionou, não importando quão complexa a linguagem. Quando no cinema o diretor filma várias tomadas da mesma atriz, de costa, perfil, diagonal, de cima, com mão no joelho, no cabelo, boca entraberta, etc e etc, busca-se o excesso da imagem e o detalhismo para construção rica na tela grande. O teatro funciona melhor no minimalismo pra causar a impressão, ao mesmo tempo que limpa a imagem deixando o objeto exposto de forma nua (...). Há ganhos e perdas, seja qual for o meio, a importância de renovar é relevante. Vivemos uma época que se pode pensar - tudo já foi criado e não nos sobrou espaços para mais nada. A ousadia não foi repelida e nossa capacidade talvez ainda exista. Tem que se quebrar espelhos sem medo das pragas do azar e fuçar os escombros do mundo arruinado (FONSECA, 2008).
A blognovela seria, portanto, um gênero híbrido entre a literatura, o teatro e o cinema. Diferente do que Alcântara supôs, Gerald pensou a peça não só como teatro, até porque ele define o que faz como cinema para o palco, assumindo a influência de Glauber Rocha.
Embora conhecido como diretor, recentemente Thomas decidiu que seria preciso dirigir e encenar somente seus próprios relatos para garantir sua assinatura própria. Thomas leva bastante a sério esse direcionamento em seu trabalho: embora tenha de fato recolhido as falas e comentários dos freqüentadores do blog para realizar a blognovela, ao encená-la preferiu uma outra solução: homenagear os mais fiéis freqüentadores do blog através da citação de seus nomes em cena, o que de fato ocorreu, e não utilizar literalmente suas palavras e falas no texto, que foi praticamente todo alterado. Do texto original da blognovela, Thomas manteve a idéia da figura de um travesti, símbolo da ambivalência e da androginia. Um exemplo do texto original:
Gerald: Bom, eu queria reunir todos vocês aqui pra tentar encenar….
(sou interrompido)
Fabio:…Gérald,…?!..Que tal falar da Dóroty Stang, Chico Mendes, o Joãzinho trinta, o “almirante” negro da revolta da chibata, o madãme satã, o dom Élder Cãmara,o Antônio Conselheiro……..!!!!!! Tem tãnto brasileiro BOM e PÓBRE, esquecido ……! Claro que o Mandela e o Bill são legais….! Mas eles não precisam de fãma ou espaço, eles já Os TEM, E MUITO..!..São RECONHECIDOS EM VIDA..! isso é muito legal. Os que CITEI, SE FUUUUUderam em VIDA E NINGUÉM TÁ NEM AÍ COM ELES..!(desculpe o palavrão)
Gerald: Peraí Fabio, calma. Eu nem falei ainda sobre o que trata esse espetáculo! Além do quê tudo já foi escrito sobre Dorothy Stang, Chico Mendes virou filme com Raul Julia e Dom Helder Câmara foi uma das pessoas mais conhecidas e reconhecidas de sua época. Mas estou aqui pra tentar montar uma peça inédita que escrevi pra vocês, do Blog. É uma espécie de remontagem de um espetáculo…. (sou interrompido de novo e vejo que o Vamp esta atacando fisicamente o Fabio). (...). Obs: todos estão mudos no espaço de ensaio. Mau Fonseca tentava dizer alguma coisa tipo “a humanidade é horrivel” mas murmurava, ninguém o ouvia. Sandra tentava socorrer o coitado do Fabio que já flutuava a mais de 30 cm de altura do chão e estava sangrando. Eu me escondia, covarde que sou, atrás da única pilastra de concreto que havia no espaço (...).
Gerald - Cacá, tudo bem, tá ótimo. Justo o que você falou aí, muito justo. Mas eu estou aqui com vocês pra remontar o espetáculo M.O.R.T.E (movimentos obsessivos e redundantes pra tanta estética - aquele que o Haroldo de Campos montou uma tese em cima e que viajou o mundo)….lembram? Nao lembram? Bem foi em 1990 e a segunda versão foi em 1991. Não lembram. É, falta cultura à essa falta de cultura. Falta memória a essa falta de memória!
Gerald – Mas Fabio, eu já disse que…..
Vamp: se voce falar mais uma palavra com esse Fabio eu saio por aquela porta ali e nao volto nunca mais!
Gerald - Mas Vamp…..
Vamp: NUNCA MAIS entendeu? NUNCA MAIS!!!!
(ouve-se uma porta batendo, a luz desce em resistencia e Fabio sussurra: “poxa, perdi meu melhor amigo.. eh a MORTE!)
Fim do Capitulo 1 de uma longa novela da blogosfera! (THOMAS, 2008).
No texto da blognovela, Thomas valorizava a oralidade da fala cotidiana, os assuntos do momento, agindo como se estivesse realmente dirigindo uma peça, refletindo, pensando alto e revendo momentos de sua própria trajetória. Ao transpor a blognovela para o palco, reduziu significativamente o texto, refazendo-o para que ele pudesse trazer referências a dilemas fáusticos sobre a relação, presente no trabalho de Thomas, entre o poder e a arte, tal como o seguinte fragmento: “Não é o que vocês estão pensando. De alguma forma, é o que vocês estão pensando. De alguma forma, o que vocês estão vendo é isto. O que vocês estão vendo confirma o que vocês estão pensando” (THOMAS, 2008).
A essa altura pode-se ver pessoas dependuradas de cabeça para baixo, com um chapéu panamá pendurado no alto de seus corpos pendentes. O chapéu panamá refere-se a um quadro de Magritte e ao trabalho de Reinaldo Azevedo, jornalista e blogueiro da revista Veja e com quem Gerald Thomas polemizou, mas conseguiu reverter a antipatia inicial, travando com ele relações de amizade, numa peripécia que muito abalou os seguidores de ambos na internet, tendo todos entrado em guerra e realizado a paz juntamente com seus “mentores”. Reinaldo Azevedo possui uma relação de oposição radical ao governo Lula, no que existem confluências com a rebeldia anárquica e oposicionista proposta por Thomas. Azevedo, no entanto, alimenta-se da crescente impopularidade do governo Lula entre parte das elites e da classe média, devendo a esse governo boa parte de sua repercussão. E ele concorda, por exemplo, que o governo Lula deve manter sua política econômica. As relações entre Reinaldo Azevedo e o governo Lula fazem lembrar a tragédia Lacerda/Getúlio, inclusive possuem algo que podemos chamar de um resquício de uma dialética. Gerald Thomas diferencia-se de Azevedo por sua posição liberal em relação a costumes, especialmente no que se trata de ecologia e liberdade sexual. Para além dessa discussão, a revista Bacante referiu-se à blognovela como “teatro filmado” e descartou-a como inferior a trabalhos como Quádos, de Beckett (como uma forma de evitar a verve polêmica de Gerald: afinal, ele não se diria melhor do que Beckett, deve ter pensado Marcelo Alcântara). No entanto, Kepler vai bem além de um teatro filmado como habitualmente se faz na televisão brasileira e é teatro agudamente experimental, fazendo jus às influências recebidas de Beckett: é um espetáculo que marca pela sobriedade e despojamento minimal e cujo claro e escuro permanece em nossas mentes. Escreveu Alberto Guzik a respeito de Kepler, the Dog:
É muito poderoso o novo trabalho de Gerald Thomas, "o cão que insultava as mulheres, Kepler, the dog". Vi ontem e ainda está girando na minha cabeça. as imagens, a força das idéias. tudo muito simples, muito despojado, e extremamente requintado. Não parece o gerald capaz de inventar máquinas cênicas complicadíssimas. Este gerald está interessado em explorar o palco nu, a caixa cênica desventrada, sem nenhuma moldura que a enfeite. O resultado é magnífico porque sofre o impacto da visão de mundo lúcida e arguta do encenador. Fabiana gugli está esplêndida, cada vez mais precisa e senhora do palco. E também brilham Duda Mamberti e Pancho Capeletti, dominam a cena com extrema segurança. Mas é das idéias do espetáculo que se precisa falar (...) (GUZIK, 2008).
Na primeira versão da blognovela, o próprio Thomas era, ao mesmo tempo, diretor e ator: ele falava como um dos demais personagens e atuava de fato como um diretor dos demais, sendo partícipe da narrativa, mas resguardando-se a posição daquele que determina a direção que a narrativa deveria tomar. Era uma espécie de “Deus intra machina”. A decisão de antropofagizar até mesmo os comentários dos leitores e trazer à luz imagens que são, como dizia Freud, unmheimlich, ou seja, ex-estranhas, foi a decisão de Gerald tomou para unificar e manter sua assinatura própria, seu gesto e escritura autoral. Rui Filho associou a peça à problemática fundamental da identidade (que ligaremos, aqui, com a de autor e autoria):
Tentar diagnosticar nossa identidade, já seria um desafio imensurável. Tratar o diagnóstico, então, pelo prisma da arte, associando esta ao poder, torna a abordagem ainda mais complexa. Tudo inicia na exposição de corpos dependurados. Escolha anunciada do próprio criador. “Porque eu coloquei ali” (...). Como responder, então, o paradoxo entre “a arte tem a cara do poder” e “o poder tem a cara da arte”? O que parece ser a mesma coisa, expõe uma problemática crucial para chegarmos a tal da identidade. Na primeira questão, a arte é colocada como artifício, instrumento de determinação de uma ordem pela subjetividade da estética; na segunda, o poder se fantasia de subjetividade para esconder sua manipulação. Mas nem tão distantes estão. Equilibram-se na existência do próprio homem como fruto responsável por ambas, já que tanto arte quanto o poder são atributos da necessidade humana de superar o meio, seja ele simbólico (e portanto cultural e natural, entendendo que a origem etimológica das duas palavras são a mesma) ou político. E é esse homem, essa figura, transformada em mulher, que vemos surgir da figura do cão. Se deus é o criador de tudo e todos, então a mulher é responsável pela continuidade da vida. É ela igualmente criadora. A humanidade se configura, portanto, na existência da criação como instrumento de adoração do criador. Adoração exposta em desejo ao próprio corpo, como o strip-tease do ator (metáfora da necessidade de abdicarmos de nossas máscaras sociais para nos reencontrarmos puros e originais), como a idolatria ao inacessível, ao inquestionável, ao que cala, representado pelo Santo Graal (face existencial de criador supremo) (FILHO, 2008).
Vale a pena registrar um ponto importante: o fato da dramaturgia ancorar no “autor”, em se tratando de Thomas, não é garantia de não-decifração. O autor mesmo possui diferentes falas conforme o momento. Em algumas situações ele é “O Rebelde Revolucionário do Teatro Carioca”, em outras ele é “Conservador Realista Norte-americano”, em outras ele fala alemão, inglês, francês. Thomas parece vivenciar, enquanto autor, a dissolução do sujeito de que trataram Nietzsche e Foucault.
A virada autoral de Thomas talvez tenha se dado no momento da grande polêmica gerada por Tristão em Isolda em 2003. Naquele momento, o gesto do autor de protestar diante das vaias da audiência foi extensamente noticiado, assumindo maior importância até do que o debate – que deveria acontecer – sobre a montagem. Na montagem, os elementos que surgiam por associação livre adquiriam maior relevância que a narrativa clássica. Podemos dizer que Gerald Thomas é pós-modernista no sentido em que Fredric Jameson analisou essas formas culturais de origem norte-americana em seu livro A Lógica Cultural do Capitalismo Tardio: o pós-modernismo surge como uma aceitação e valorização do momento presente, representando, portanto, um abandono praticamente total das utopias da modernidade. Por isso em seu Tristão e Isolda aparece Freud cheirando cocaína, junto a desfiles de moda, etc. A modernidade (Freud, Wagner) foi ali problematizada e, em boa parte, desconstruída. Sua direção foi entendida no Brasil, muitas vezes, como provocação hermética “chata” ou “pretensiosa”, assim como proclamação do vale-tudo nas artes, o que é um grande equívoco.
Minha hipótese é que, a partir da enorme repercussão do gesto autoral ao final de Tristão e Isolda, Thomas tenha decidido tecer sua obra a partir da autobiografia e dos gestos autorais conscientes. O gesto de protesto do encenador em Tristão e Isolda resultou em um processo para Gerald Thomas, processo ao qual ele respondeu politizando os ataques aos quais foi submetido: a era Lula, do tão esperado governo “de esquerda”, favorecia uma nova censura e acusações de elitismo contra ele. O processo acabou arquivado, mas suponho que, mais do que a visão da queda das Torres Gêmeas em 2001, seja esse fato que pode fazer o papel de navio que nos pode guiar para o maelstrom (redemoinho) que é a obra de Gerald Thomas.
Para uma melhor compreensão dessa obra multifacetada é preciso ouvir a voz do autor. Mas esse é um dos enigmas de Thomas: o próprio autor se define como um significante tantalizado, ou seja: o Holandês Voador. Ele assume uma identidade multinacional, não desejando representar a arte de nenhum país, a não ser, quem sabe, a América mestiça e de muitas vozes. Ele é anfótero: conforme o meio, ele assume o papel de ácido ou de base.
Como comentou o crítico Alberto Guzik, em Kepler Gerald Thomas deixou limpa a cena, deixando a “máquina cênica” quase nua, ele que já elaborou complicadas máquinas cênicas tal como em Carmen com Filtro. Essa clareza cênica não implica a ausência de alguns estilemas que celebrizaram o encenador: a voz em off do encenador que substituiu a voz de um ator que está em cena (Duda Mamberti), o texto oscilando entre a simplicidade e o hermetismo, a iluminação que faz sobressaltar o jogo do claro e escuro, as referências eruditas (Susan Sontag), misturando-se às de massa (Led Zeppelin) e às artes plásticas (Magritte), assim como uma reflexão sobre o poder. A reflexão fáustica sobre o poder é muito presente na obra de Gerald Thomas e ele mesmo assume que não dissocia política e estética, tal como Jameson teoriza em A Lógica Cultural do Pós-Modernismo: a superestrutura, no capitalismo tardio, perdeu boa parte da autonomia anterior.
4 A VOZ AUTORAL EM BATE MAN: O AUTOR COMO ISCA DE SI MESMO
Bate-Man, espetáculo mais recente de Gerald Thomas, revê, com precisas variações, questões que tratamos acima. Nessa peça o autor reflete sobre os processos que fazem sua arte através da apropriação de seu próprio trabalho e de suas criações passadas. Iconoclasta por vocação e desejo, era de se esperar que, em algum momento, fosse ao extremo de si mesmo para se recompor. Muitas são as referências paralelas a montagens recentes. As garrafas vazias (Ventriloqüist), o chão estéril de terra (Nowhere Man), as caixas e o encontro com os segredos históricos metaforizados em seus conteúdos de restos humanos (Circo de Rins e Fígados), o desfile de moda (Nietzsche x Wagner), o porão como lugar não-identificável (O Príncipe de Copacabana), os remédios e vitaminas (Terra em Trânsito), o corpo dependurado pelos pés (O Cão que Insultava Mulheres, Kepler, the Dog). Com paciência, papel e caneta chegaríamos a mais tantas outras. E o que isso quer dizer? Assim como assinala o argumento de Bate Man – o homem isca –, Gerald se fisga num panteão simbólico por ele criado, na última década, onde a construção de vocabulário particular identifica autoria e destreza. Poucos são, verdadeiramente, os artistas a constituírem um discurso preciso e particular, mesmo entre os bons artistas. Quase sempre nos defrontamos com apropriações circunstanciais, estímulos produtificados de alfabetos comuns e gerais. Gerald, não. Faz do palco e cena a expressão de um complexo sistema de metáforas organizadas a partir de percepções próprias dos fatos históricos, reavaliando suas origens através de provocativas reinterpretações sígnicas. O autor, mais do que tudo, conserva os valores deturpando qualquer possibilidade de estagnação histórica, levando os fatos e circunstância a constituírem um elaborado jogo de origens e conseqüências, como que nos avisando de haver muito mais no ontem na constituição do agora. Nessa perspectiva, por que deveria ele abrir mão de si mesmo? Bate Man argumenta, portanto, a favor do autor determinando sua particularidade e individualidade, tanto estética quanto argumentativa, em um panteão contemporâneo estéril de pessoalidades e olhares originais.
As garrafas de vinho tinto espalhadas pela cena oferecem ao espectador a possibilidade de contextualizar-se à história. E não qualquer história. A que nos torna piores do que desejamos ser. São vinhos originados em sangue humano produzidos durante a ascensão e queda do Terceiro Reich. Mas não devemos nos limitar ao tal período. A guerra hitlerista é outra vez argumento simbólico. Gerald fala de todas, identificando o horror inerente ao espectro maior do Holocausto. Assim, o homem isca, retorna à sua função de traduzir o coletivo, a face comum que nos identifica, num jogo metafórico digno de Charles S. Peirce e semioticistas de plantão. Está na guerra a maior atrocidade humana, o princípio destruidor que nos iguala e distancia, paradoxalmente. E Gerald, insistente sobre isso, vem tramando, sucessivamente, espetáculos cujo foco primordial é compreender em que momento desse paradoxo tombamos ao distanciamento. Se por um lado, o teatro reserva a comunhão dionisíaca, por outro, o discurso que se pretende questionador desagrada ouvidos. Gerald se utiliza da artimanha do humor, ou melhor, do ridículo para nos aprisionar interessados. Na construção de circunstâncias absurdas, revela o mais próximo de nossas idiossincrasias. O patético em ser humano. E a culpa histórica e religiosa configurada no absurdo da surdez autista. Um homem banha-se e serve-se voluptuosamente de vinho de sangue humano decorrente de guerras, assassinatos e atrocidades históricas. E rimos disso sem perceber que abrimos diariamente as mesmas garrafas, embriagados que estamos pelas manipulações. Enquanto nos distanciamos do ontem, na perspectiva errônea do novo, prostituímo-nos ao silenciar de toda e qualquer responsabilidade por nossos atos. Sim, nossos. Não o do indivíduo, mas de toda a humanidade. Somos, assim, iscas de um teatro ainda pior, maior, orwelliano. Nas guerras encenadas de Gerald Thomas, a humanidade é culpada por omissão, e em Bate Man, o homem devaneia embriagado pela crueldade da consciência. Como o homem de Dostoiévski, em Notas do Subterrâneo, o de Gerald opta por permanecer isolado, porém bêbado, travestido de estética e futilidade, conduzido ao sofrimento de Prometeu pelo exercício da reflexão.
Gerald exercita um saboroso monólogo sobre o silêncio, apoiado na consistência da trilha de Patrick Grant e das alongadas notas de guitarra. Não há como suprir a voz calada, nem mesmo como calar o som estridente e persistente. Bate Man mostra que estamos afundados em nossas ausências. E nada mais coerente, então, do que o autor, encenador, cenógrafo e iluminador, buscar socorro em si mesmo. O mundo se tornara excessivamente absurdo. E beber sangue humano não me parece nada além de uma possibilidade futura dentre as demais.
Gerald Thomas propõe trocadilhos para além das palavras em seu Bate Man, em cartaz do Espaço Sesc, em Copacabana, como se a ação, ou inação, do homem submetido ao “banho de vinho tinto de sangue” fizesse parte do jogo das inevitabilidades do nosso tempo. O indivíduo, torturado pela banalidade da violência, transformado numa peça de carne pendurada numa exposição de atrocidades, se esvai pelas frestas de uma realidade de sentidos duplos e aparências enganosas, que o imobiliza e atrai a sua perplexidade. Vejamos uma passagem do texto:
(Vira de costas e toma mais banho de vinho.
Murmura pra si mesmo.)
Sabe que… eu acho nunca vi….
Sinceramente.
Eu vou dizer uma coisa para vocês…
Ai…
Sinceramente.
Ai….
(pigarreia algumas vezes, como se preparando para falar.
Murmurando.)
Acho que….
Eu nunca achei que agradar a Burguesia seria desperdiçar aquilo, aquilo que eles acreditam ter de melhor. E agora? Que eu fiz tudo isso aqui.
Qual será a próxima?
(tempo, pensando.
Conclui.)
Um banho de caviar?
Banho de caviar.
(olha para baixo e vê caixas de caviar.
Encontra caixas de caviar.
Se assusta com a surpresa.)
Ahhh (...).
E OLHA QUE LOUCURA ESSA AGORA!
MEU DEUS DO CÉU.
Roupas FASHION!
Não posso acreditar.
Um John Galiano direto da próxima coleção de verão!
WOW!
(entra música. Bate Man se veste e começa a desfilar) (THOMAS, 2008).
Portanto, o que resta a esse homem, bêbedo do real, mas que desconhece as razões para o que vive, encharcado de incoerência e de culpa. No teatro de meias verdades ou de mentiras cínicas, interpreta o papel do bufão ensangüentado que bebe vinhos de safras incontornáveis e participa, como foi visto acima, de patético desfile de moda, numa antropofágica deglutição da imensa solidão do silêncio dos tempos.
Nas metáforas da existência na atualidade, Gerald Thomas não abandona as citações, a busca de representar o momento com fatos do passado, de reinterpretar significados e reverberar a imobilidade ruidosa. A escrita cênica de Gerald Thomas capta a intensidade com que expõe as suas próprias dúvidas e inflexiona a arte contemporânea. A capacidade de criar identidade visual para suas montagens permite que o autor, diretor e cenógrafo deixe, a cada espetáculo, a sua marca também na ambientação. Em Bate Man, a semi-arena coberta de areia, com caixas de vinho espalhadas pelo chão e um simulacro de palco ao fundo, cuja cortina se abre para desvendar atrocidades, confirma a sua mão firme para o desenho da cena.
CONCLUSÃO
A obra de Gerald Thomas é uma obra de signos em rotação. Concluímos aqui que entrou numa rotação ainda mais intensa recentemente, acelerando o seu maelstrom de referências. O “turning point” da obra, supomos, foi o gesto autoral de protesto em Tristão e Isolda. O resultado foi a guinada para relatos intensamente autorais ou até mesmo autobiográficos que realizou o autor em Terra em Trânsito e Rainha Mentira (Queen Liar). Analisamos também, brevemente, a blognovela O cão que atacava mulheres ou: Kepler, the dog, considerada por Gerald Thomas como continuação da trilogia iniciada em Terra em Trânsito e Rainha Mentira. A blognovela passou por uma transformação entre o seu formato original no blog e a encenação. Nessa mudança, investigou-se o traço autoral de Thomas. Ao verter a peça, originalmente apenas literária, para o teatro, Thomas tornou-a algo marcado pela preocupação em, com imagens de pesadelo, buscar mobilizar o inconsciente, refletir as relações entre arte e a política no mundo atual, referindo-se indiretamente a episódios de tortura em Abu Ghraib, por exemplo. Em Bate Man, ele continua esse trabalho autoral de encenação de si mesmo em um monólogo escrito para o ator Marcelo Olinto.
REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ALBUQUERQUE, Severino J. O Teatro Brasileiro na Década de Oitenta. Latin American Review. No. 25.2 (Spring 1992), p. 23-36.
ALCANTARA, Marcelo. Crítica: O cão que insultava as mulheres: Kepler, the dog. Revista Bacante. Disponível em:. Acesso em 20/01/2009.
BOOTH, The Rethoric of Fiction. Chicago University Press: 1983.
BROOK, Peter. O Teatro e seu Espaço. Rio de Janeiro: Vozes, 1970.
FILHO, Rui. Kepler, o cão atordoado. Disponível em:. Acesso em 20/01/2009.
FONSECA, Mau. O Teatrocinema da blognovela. Disponível em:. Acesso em 20/01/2009.
GEORGE, David. Gerald Thomas postmodernist theatre: a wagnerian antropofagia? Luso-brasilian Review, XXXVII, 1998.
GUINSBURG, Jacó et. FERNANDES, Sílvia. Um encenador de si mesmo: Gerald Thomas. São Paulo: Editora Perpectiva, 1996.
GUZIK, Alberto. O Impacto de Kepler. Disponível em:. Acesso em 20/01/2009.
JAMESON, Fredric. A Lógica Cultural do Capitalismo Tardio. São Paulo: Ática, 1996.
MACKSEN Luiz. Texto pretensioso de Gerald Thomas expõe crueldade de nosso tempo. Disponível em:. Acesso em 21/01/2009.
REIS, Luís Augusto. Piscator, Brecht, Boal e Artaud – Considerações sobre o teatro político. Disponível em:. Acesso em 21/01/2009.
THOMAS, Gerald. Press. Disponível em:. Acesso em 21/01/2009.
http://tudoazulzim.blogspot.com/
E um texto que a dona do blog, professora, me pediu:
NOTAS SOBRE O TEATRO DE GERALD THOMAS: UMA DESCIDA NO MAELSTROM
Lúcio Emílio do Espírito Santo Júnior
RESUMO
Esse texto busca analisar a trilogia do encenador Gerald Thomas iniciada com Rainha Mentira (Queen Liar), Terra em Trânsito e, no ano de 2008, enriquecida pela blognovela O cão que atacava mulheres: Kepler, the dog, além de Bate-Man, monólogo escrito para Marcelo Olinto. O texto analisa a virada autoral de Thomas, que passa a partir desses textos a fazer relatos marcadamente autorais, senão autobiográficos, como mais uma forma de cultivar a sua assinatura enquanto autor, mais próximo, segundo ele, do cinema de Glauber Rocha do que realizam, no teatro, os chamados diretores teatrais, um título que Thomas desconsidera e julga figurativo. A partir do texto original da blognovela, escrito por Gerald em seu blog, desvendamos um pouco de seu processo criativo: ao encenar a peça, Gerald Thomas substituiu um texto mais lúdico e coloquial, ligado ao cotidiano, por imagens derivadas do inconsciente inspiradas nos símbolos que criava Beckett.
Palavras-chave: dramaturgia, Terra em Trânsito, Queen Liar, Kepler, Gerald Thomas, blognovela, teatro, Ópera Seca, pós-modernismo
ABSTRACT
This text analyzes the works of the encenador Gerald Thomas initiated with Rainha Mentira (Queen Liar), Land in Transit and, in the year of 2008, his blog´s soap opera named The dog that attacked women: Kepler, the dog. The text analyzes the authorial turn of Thomas, who pass from drama director from authorial and autobiographical dramasas as a form to cultivate its signature while author, next according to it of the cinema of Glauber Rocha of what of they carry through it, in the theater, his teatrical managing calls, a heading that Thomas disrespects and judges figurative. From the original text of blog´s soap opera, congregated in his blog,this work unmasks a little of his creative process: at the moment where it was staged, Gerald Thomas substituted a text more ordinary and playful for images derived from the unconscious one inhaled in the symbols that Beckett created.
Key-words: Land in Transit, Queen Liar, Kepler, Gerald Thomas, blognovela, theater, Dry Opera, post-modernism
INTRODUÇÃO
O início dos anos 80 foi o momento em que o Brasil reconheceu o talento de encenador de Gerald Thomas. O contexto em que sua peça Quatro Vezes Beckett fez sucesso era de redemocratização e abandono das preocupações políticas dos anos 70. A partir de então, transformou-se o contexto em que boa parte dos diretores e dramaturgos brasileiros tinham sido primordialmente brechtianos, mas vivia-se um momento em que Brecht foi perdendo, paulatinamente, sua influência.
Essa pesquisa visa estudar e verificar uma importante mudança ocorrida na carreira do encenador Gerald Thomas desde meados dos anos 2000: Gerald decidiu não mais encenar textos de outros autores, esforçando-se agora por encenar e redigir sua própria dramaturgia. A primeira experiência dessa nova fase foram as peças Terra em Trânsito e Rainha Mentira (Queen Liar). Ele se aproxima, portanto, do traço autoral de um Glauber Rocha, que sempre escrevia e dirigia seus filmes, tendo todos eles a sua marca, sua assinatura autoral e muitas vezes, como em Idade da Terra, sua presença física e voz propriamente ditas.
Nos anos 90, o crítico David George Thomas já considerava Thomas como mais do que um diretor e sim um encenador surgido a partir de uma visão original das obras de Beckett nos anos 80. É comum nas peças de Thomas a interferência da própria voz do encenador. Por exemplo, em Queen Liar, a narrativa autobiográfica apresenta constantemente a voz do encenador que faz intervenções narrativas. Essa voz narrava, por exemplo, que a personagem da avó se assemelhava a uma personagem do pintor Otto Dix (expressionista alemão que protestou contra guerra pintando os mutilados e mortos). Já Terra em Trânsito, que Gerald considera a mesma peça, refere-se claramente a Terra em Transe, filme de Glauber Rocha: cita-se, por exemplo, o apaixonado por ópera Paulo Francis, enquanto Terra em Transe era o epitáfio do jornalista e poeta ficcional Paulo Martins. Em Terra em Trânsito, uma cantora de ópera se vê presa em seu camarim e entra num processo de enlouquecimento enquanto escuta um discurso reacionário Francis no rádio e desespera-se enquanto alimenta um ganso para fazer foie gras. Trata-se de uma oscilação freqüente na obra de Gerald Thomas e que talvez seja o drama do artista contemporâneo: ele oscila entre um ceticismo neopositivista (“nada prova nada”) e o desespero ultra-romântico (a diva em crise na carreira, Hamlet/Paulo Martins).
Recentemente, em 2008, Thomas realizou mais uma peça que continua essa trilogia iniciada com Terra em Trânsito: a peça O cão que atacava mulheres, Kepler, the dog, inspirada numa blognovela realizada por Gerald Thomas juntamente com os participantes de seu blog no provedor Ig, internet gratuita. Nela, um cão de nome Kepler perambula entre um cenário de pesadelo que, dentre muitos outros personagens, vê imagens que fazem lembrar as torturas nas bases norte-americanas de Abu Ghraib e Guantánamo, assim como um executivo suicida, a busca do Santo Graal, etc. O cão (Fabiana Gigli) está na coleira do personagem do executivo (Duda Mendonça), mas faz referência à imagem, muito recorrente na mídia, da militar norte-americana no Iraque trazendo um prisioneiro iraquiano na coleira, imagem associada a uma mulher dominadora da imagética sadomasoquista, a dominatrix. A dramaturgia de Thomas possui, portanto, referência a um universo de referências muito particular e caro ao autor: Living Theatre, Stoppard, Orwell, Kafka, Kantor, Duchamp, Haroldo de Campos, Oswald de Andrade, às montagens do próprio Gerald Thomas, entre outros.
Gerald Thomas é um enigma, mas não um enigma vazio, como alguns querem que seja a arte contemporânea. Para o crítico norte-americano David George, Gerald realiza uma antropofagia wagneriana. Enquanto isso, no Brasil, devido à sua posição polêmica dentro do teatro brasileiro, é acusado de fazer imperialismo cultural. David George estabelece uma linha de influências para Gerald Thomas no Brasil: José Celso Martinez Corrêa e Antunes Filho, assim como a dramaturgia de Nelson Rodrigues, em homenagem a quem Thomas dirigiu uma peça chamada “Asfaltaram o Beijo”. Ele seria o principal divulgador do pós-modernismo no teatro brasileiro. Mas Thomas vai bem além e é um agitador cultural que exerce muito bem o seu talento para o jornalismo, diferente da tendência de Beckett para escrever poemas e prosa mais extensa. Thomas, por sua vez, é show man: atua como colunista em veículos como Ig, Folha Ilustrada, comentarista no prestigiado programa de TV Manhattan Connection, etc.
2 DE BECKETT A KEPLER
Gerald Thomas começou como seguidor de Beckett e com ele ainda possui muito em comum. Em primeiro, ele surge de uma revisão de Brecht e do teatro político, que terminava não alcançando as camadas populares a quem dirigia seu discurso. Além dessa inabilidade de chegar às camadas populares, e diretamente associada a ela, uma outra dificuldade tem caracterizado uma considerável parcela do teatro dito político: a predominância do compromisso didático em detrimento das preocupações estéticas. Isto é, um desequilíbrio entre conteúdo e forma. Apesar de Brecht enfatizar por diversas vezes em seus escritos teóricos que o teatro engajado não precisaria, nem deveria, excluir o caráter de diversão próprio a essa arte, muitos dos seus seguidores incorreram nesse erro e construíram espetáculos sisudos, excessivamente intelectualizados e de pouco apelo para o grande público. Como explica o encenador Gerald Thomas:
Pouco foi dito sobre isso, mas o efeito de distanciamento, de esfriamento, de racionalização e de didatismo sobre uma arte que é, essencialmente, fabulesca e metafórica começou como uma saudável doença de alerta e acabou por se tornar seu vírus mais fatal (THOMAS apud GUINSBURG et al FERNANDES, 1996, p. 37).
Diante desses impasses, em um mundo pós-muro de Berlin, o teatro político tem sido impelido a redimensionar seus objetivos e suas práticas. O próprio trabalho de Boal evidencia uma busca por um novo posicionamento teórico. Quando comparado ao Teatro político de Piscator, por exemplo, percebe-se que no Teatro do Oprimido já não há um enfoque explícito na questão da luta de classes. A "revolução" de que fala Boal pode também significar uma radical modificação interna do indivíduo-espectador. É a partir da necessidade desse tipo de modificação e da dificuldade em obtê-la é que está o traço que podemos notar em Beckett e Thomas.
Para explicar Thomas, tratemos de Beckett. Em The Rhetoric of Fiction, Wayne Booth utilizou, numa edição revista, a novela Company de Beckett como exemplo de sua teoria do autor implícito, aplicando-a em uma narrativa contemporânea. Como definir Beckett e aquilo que pode ter influenciado Thomas? Tomemos as palavras de Peter Brook:
Talvez a escrita mais intensa e pessoal de nosso tempo venha de Samuel Beckett. As peças de Beckett são símbolos no sentido exato da palavra. Um símbolo falso é mole e vago; um símbolo verdadeiro é duro e claro. Quando dizemos “simbólico” frequentemente queremos dizer enfadonhamente obscuro; já um símbolo verdadeiro é específico, é a única forma de expor uma certa verdade. Os dois homens esperando ao lado de uma árvore seca, o homem gravando a si próprio em fitas, os dois homens escravos de uma torre, a mulher enterrada na areia até a cintura, os pais em latas de lixo, as três cabeças nos vasos: essas são invenções puras, imagens frescas, agudamente definidas – e funcionam no palco como objetos. São máquinas teatrais. As pessoas sorriem delas, mas elas ficam firmes: são à prova de crítica. Não chegaremos a lugar nenhum se esperamos que elas nos sejam explicadas, entretanto cada uma tem uma relação conosco que não podemos negar. Se o aceitamos, o símbolo nos provoca uma grande e pensativa exclamação (BROOK, 1970, p. 57).
Assim como em Company não é preciso explicar de onde vem a voz que sugere ao personagem que imagine, Gerald busca símbolos que não precisem ser explicados nem entendidos racionalmente e sim imagens que falem direto ao inconsciente, símbolos tais como Beckett fazia: e símbolos duros. São símbolos poderosos presentes nas peças recentes de Thomas: em Queen Liar, a figura distorcida da avó que era como um personagem de Otto Dix, a cantora de ópera em crise e seu ganso em vias de virar foie gras, um cão em forma de mulher que diz um texto filosófico enquanto defeca no chão.
Os pontos em comum entre Gerald Thomas e Samuel Beckett ficam mais claros quando se avalia alguns pontos da análise de Wayne Booth a respeito da novela Company. Em alguns momentos, é como se ele estivesse falando da blognovela que ora estamos estudando. O texto de Beckett é um “texto para nada”. Essa forma de limitar artificialmente as palavras imaginadas para fazer um quebra-cabeças minimalista é presente nas peças de Thomas e de Beckett. Para se ter uma idéia, Company inicia-se com a enigmática frase: “Uma voz chega para alguém no escuro. Imagine” (BECKETT apud BOOTH, 1983, p. 445). Tanto o mestre quanto o herdeiro tratam da falta de sentido do mundo. O mundo, em seus textos, é predestinado a ser sentido, e o recurso de escrever sobre ele, “para ter companhia”, está destinado ao fracasso insignificante, produzindo não mais do que falência supérflua e miséria. Ambos buscam estabelecer um equilíbrio delicado entre criar situações que complexas e que geram perplexidade, mas que não são tão confusas ao ponto de não despertarem a curiosidade e demandarem uma interpretação.
3 A VOZ AUTORAL EM KEPLER, O CÃO QUE ATACAVA MULHERES
Gerald Thomas foi uma voz autoral desde o início de sua carreira. Sua interpretação das peças de Beckett já tinha uma assinatura própria. “Julian Beck morreu durante uma voz que ele ouviu, gravada por ele mesmo e ouvida por ele próprio” (THOMAS, 2008), referência em off que entra com a voz de Gerald Thomas quando o personagem de Duda Mamberti está em cena na peça O cão que atacava mulheres: Kepler, the dog e que refere-se à montagem de um texto que Beckett escreveu para Julian Beck quando este já era paciente terminal de câncer (All Strange Away e The Time). O texto em off, surgido devido a exigências extra-artísticas em Nova York, onde, para se apresentar uma peça é preciso depositar pagar um valor vultoso para o ator a título de seguro, encarecendo a peça e obrigando o diretor a ter a voz do ator ao invés de tê-lo presente, passou a ser usado de forma muito inovado como recurso anti-realista por Thomas, num lance verdadeiramente antropofágico, revertendo o desfavorável em favorável e fazendo da voz em off um de suas marcas autorais mais importantes.
Tanto nas peças que ele escreve quanto nos textos que dirige, Thomas busca acionar uma simbólica profunda, vinda do inconsciente, criando símbolos e imagens fortes como os que estão presentes na obra de Samuel Beckett. Quando Thomas surgiu, o Brasil vivia um momento onde se buscava novos caminhos para a dramaturgia. A problemática coletiva dava lugar às questões individuais. O trabalho de Thomas não se filia nem a Brecht nem a Stanislavski, nem segue ortodoxamente os métodos nem de um nem de outro. Thomas recusa tanto o método épico-didático de Brecht (não transmite conteúdos socialistas, prefere polemizar com a esquerda) quanto o método de Stanislavski, que segundo ele não seria apropriado para o teatro (pois o teatro exigiria principalmente projeção de voz), adequando-se melhor ao cinema (a propósito, ele cita o Actor´s Studio, estúdio norte-americano que aplicou amplamente em Hollywood o método do russo, ajudando a criar atores tais como Marlon Brando). Marcelo Alcântara comentou a respeito na revista A Bacante:
(...) Muitas das características do que se vê na tela são facilmente relacionáveis ao nome e à obra de Thomas - uma montagem textocêntrica e sem linearidade, entrecortada por milhares de assuntos, embalada por imagens construídas com rigor, muita fumaça, jogos de luzes e narração em off dublando personagens em cena. Nada disso é novidade, mas aqui há muito mais do que a tradicional relação forma/conteúdo: ganha força também o fator meio (nã-não, não o centro, tô falando do medium por onde o espetáculo é transmitido) - e as influências que esse meio impõe à forma do que é produzido (...). Mas diferente dos roteiros escritos por Samuel Beckett para a TV, por exemplo, Kepler, The Dog visto pela mediação da tela do monitor não passa de um espetáculo concebido para o palco - ainda que sua realização visasse a transmissão pela rede. Por mais que tenha surgido a partir da internet e só faça sentido considerando este fato, o primeiro capítulo da blognovela de Gerald Thomas ainda é teatro filmado, com toda a importância que o registro da efemeridade do palco pode ter, mas também com toda a precariedade e ingenuidade de câmeras que tentam dar conta de captar o todo de forma documental e com pouco diálogo com o meio a que a obra se destina (vale ressaltar que a busca por atores via internet, por meio do envio de vídeos, dialoga muito mais com o meio do que o próprio resultado final). Para os próximos episódios desta blognovela, fica a expectativa de que além da inspiração na atividade colaborativa, haja maiores apropriações (e por que não questionamentos e subversões?) da tecnologia como forma de transformação (e não apenas reprodução/propagação) da produção teatral - além da torcida para que o produto final transmitido pelos precários serviços de banda larga brasileiros seja minimamente estimulante a quem não está num teatro escuro cheio de fumaça (e cujos focos de atenção não estão condicionados a seguir os movimentos de luz e som que ocorrem em cena) (ALCANTARA, 2008).
Divergimos da crítica acima no seguinte ponto: a blognovela foi concebida primeiramente como texto literário, somente depois foi encenada, de maneira totalmente repensada, pela Companhia Ópera Seca e pensado simultaneamente para ser encenado no palco e transmitido pela internet. Diz Mau Fonseca a respeito do “teatrocinema da blognovela”, quase como se estivesse respondendo às críticas acima elencadas por Marcelo Alcântara:
O teatro visto por uma tela pequena de computador sujeito às entropias da exibição intra-pessoal (algo que não seja pessoalmente) é como a comunicação diária no blog. Todos são íntimos distantes, sujeitados a uma entropia diária - a mensagem é verdadeira, mas os formatos criados (os nicknames e as técnicas) dentro do blog são falsescas, tal como na produção cinematográfica. Então, por associação, o blog é como o cinema também, mesmo parecendo absurdo. A encenação da peça ao vivo, como num ensaio, era teatro apenas pra quem estava na platéia, o cenário, elenco, a fumaça, a interação e o peso dos corpos e sons. Ao público em casa, era também uma peça teatralizada porque não houvera montagem anterior, seguia-se obviamente um roteiro, mas a montagem era ao vivo (o plen-air impressionista) - portanto teatro. E a criação foi com base teatral, Gerald é homem do teatro, e sua cia. faz parte do universo teatral. Nossa visão se deslocava na tela do computador procurando pontos focais, sendo que em determinados momentos a tela se escurecia, um corte cinematográfico e teatral. É o teatrocinema ou nenhum dos dois...de repente não é uma coisa ou outra, é apenas uma obra audiovisual, como uma vídeo arte ou "Performance Body Art" que poderia ser reproduzida em paredes de museus ou encostas de morros, laterais de prédios, projetada por grandes projetores interferindo na paisagem, o que aumentaria a percepção e ao mesmo tempo provocaria outras interferências perceptivas em relação ao tema. Afinal, as idéias ou conceitos eram mais importantes que o formato, o que deveria ser relevante era a mensagem. E foi justamente a mensagem que prevaleceu e sendo assim funcionou, não importando quão complexa a linguagem. Quando no cinema o diretor filma várias tomadas da mesma atriz, de costa, perfil, diagonal, de cima, com mão no joelho, no cabelo, boca entraberta, etc e etc, busca-se o excesso da imagem e o detalhismo para construção rica na tela grande. O teatro funciona melhor no minimalismo pra causar a impressão, ao mesmo tempo que limpa a imagem deixando o objeto exposto de forma nua (...). Há ganhos e perdas, seja qual for o meio, a importância de renovar é relevante. Vivemos uma época que se pode pensar - tudo já foi criado e não nos sobrou espaços para mais nada. A ousadia não foi repelida e nossa capacidade talvez ainda exista. Tem que se quebrar espelhos sem medo das pragas do azar e fuçar os escombros do mundo arruinado (FONSECA, 2008).
A blognovela seria, portanto, um gênero híbrido entre a literatura, o teatro e o cinema. Diferente do que Alcântara supôs, Gerald pensou a peça não só como teatro, até porque ele define o que faz como cinema para o palco, assumindo a influência de Glauber Rocha.
Embora conhecido como diretor, recentemente Thomas decidiu que seria preciso dirigir e encenar somente seus próprios relatos para garantir sua assinatura própria. Thomas leva bastante a sério esse direcionamento em seu trabalho: embora tenha de fato recolhido as falas e comentários dos freqüentadores do blog para realizar a blognovela, ao encená-la preferiu uma outra solução: homenagear os mais fiéis freqüentadores do blog através da citação de seus nomes em cena, o que de fato ocorreu, e não utilizar literalmente suas palavras e falas no texto, que foi praticamente todo alterado. Do texto original da blognovela, Thomas manteve a idéia da figura de um travesti, símbolo da ambivalência e da androginia. Um exemplo do texto original:
Gerald: Bom, eu queria reunir todos vocês aqui pra tentar encenar….
(sou interrompido)
Fabio:…Gérald,…?!..Que tal falar da Dóroty Stang, Chico Mendes, o Joãzinho trinta, o “almirante” negro da revolta da chibata, o madãme satã, o dom Élder Cãmara,o Antônio Conselheiro……..!!!!!! Tem tãnto brasileiro BOM e PÓBRE, esquecido ……! Claro que o Mandela e o Bill são legais….! Mas eles não precisam de fãma ou espaço, eles já Os TEM, E MUITO..!..São RECONHECIDOS EM VIDA..! isso é muito legal. Os que CITEI, SE FUUUUUderam em VIDA E NINGUÉM TÁ NEM AÍ COM ELES..!(desculpe o palavrão)
Gerald: Peraí Fabio, calma. Eu nem falei ainda sobre o que trata esse espetáculo! Além do quê tudo já foi escrito sobre Dorothy Stang, Chico Mendes virou filme com Raul Julia e Dom Helder Câmara foi uma das pessoas mais conhecidas e reconhecidas de sua época. Mas estou aqui pra tentar montar uma peça inédita que escrevi pra vocês, do Blog. É uma espécie de remontagem de um espetáculo…. (sou interrompido de novo e vejo que o Vamp esta atacando fisicamente o Fabio). (...). Obs: todos estão mudos no espaço de ensaio. Mau Fonseca tentava dizer alguma coisa tipo “a humanidade é horrivel” mas murmurava, ninguém o ouvia. Sandra tentava socorrer o coitado do Fabio que já flutuava a mais de 30 cm de altura do chão e estava sangrando. Eu me escondia, covarde que sou, atrás da única pilastra de concreto que havia no espaço (...).
Gerald - Cacá, tudo bem, tá ótimo. Justo o que você falou aí, muito justo. Mas eu estou aqui com vocês pra remontar o espetáculo M.O.R.T.E (movimentos obsessivos e redundantes pra tanta estética - aquele que o Haroldo de Campos montou uma tese em cima e que viajou o mundo)….lembram? Nao lembram? Bem foi em 1990 e a segunda versão foi em 1991. Não lembram. É, falta cultura à essa falta de cultura. Falta memória a essa falta de memória!
Gerald – Mas Fabio, eu já disse que…..
Vamp: se voce falar mais uma palavra com esse Fabio eu saio por aquela porta ali e nao volto nunca mais!
Gerald - Mas Vamp…..
Vamp: NUNCA MAIS entendeu? NUNCA MAIS!!!!
(ouve-se uma porta batendo, a luz desce em resistencia e Fabio sussurra: “poxa, perdi meu melhor amigo.. eh a MORTE!)
Fim do Capitulo 1 de uma longa novela da blogosfera! (THOMAS, 2008).
No texto da blognovela, Thomas valorizava a oralidade da fala cotidiana, os assuntos do momento, agindo como se estivesse realmente dirigindo uma peça, refletindo, pensando alto e revendo momentos de sua própria trajetória. Ao transpor a blognovela para o palco, reduziu significativamente o texto, refazendo-o para que ele pudesse trazer referências a dilemas fáusticos sobre a relação, presente no trabalho de Thomas, entre o poder e a arte, tal como o seguinte fragmento: “Não é o que vocês estão pensando. De alguma forma, é o que vocês estão pensando. De alguma forma, o que vocês estão vendo é isto. O que vocês estão vendo confirma o que vocês estão pensando” (THOMAS, 2008).
A essa altura pode-se ver pessoas dependuradas de cabeça para baixo, com um chapéu panamá pendurado no alto de seus corpos pendentes. O chapéu panamá refere-se a um quadro de Magritte e ao trabalho de Reinaldo Azevedo, jornalista e blogueiro da revista Veja e com quem Gerald Thomas polemizou, mas conseguiu reverter a antipatia inicial, travando com ele relações de amizade, numa peripécia que muito abalou os seguidores de ambos na internet, tendo todos entrado em guerra e realizado a paz juntamente com seus “mentores”. Reinaldo Azevedo possui uma relação de oposição radical ao governo Lula, no que existem confluências com a rebeldia anárquica e oposicionista proposta por Thomas. Azevedo, no entanto, alimenta-se da crescente impopularidade do governo Lula entre parte das elites e da classe média, devendo a esse governo boa parte de sua repercussão. E ele concorda, por exemplo, que o governo Lula deve manter sua política econômica. As relações entre Reinaldo Azevedo e o governo Lula fazem lembrar a tragédia Lacerda/Getúlio, inclusive possuem algo que podemos chamar de um resquício de uma dialética. Gerald Thomas diferencia-se de Azevedo por sua posição liberal em relação a costumes, especialmente no que se trata de ecologia e liberdade sexual. Para além dessa discussão, a revista Bacante referiu-se à blognovela como “teatro filmado” e descartou-a como inferior a trabalhos como Quádos, de Beckett (como uma forma de evitar a verve polêmica de Gerald: afinal, ele não se diria melhor do que Beckett, deve ter pensado Marcelo Alcântara). No entanto, Kepler vai bem além de um teatro filmado como habitualmente se faz na televisão brasileira e é teatro agudamente experimental, fazendo jus às influências recebidas de Beckett: é um espetáculo que marca pela sobriedade e despojamento minimal e cujo claro e escuro permanece em nossas mentes. Escreveu Alberto Guzik a respeito de Kepler, the Dog:
É muito poderoso o novo trabalho de Gerald Thomas, "o cão que insultava as mulheres, Kepler, the dog". Vi ontem e ainda está girando na minha cabeça. as imagens, a força das idéias. tudo muito simples, muito despojado, e extremamente requintado. Não parece o gerald capaz de inventar máquinas cênicas complicadíssimas. Este gerald está interessado em explorar o palco nu, a caixa cênica desventrada, sem nenhuma moldura que a enfeite. O resultado é magnífico porque sofre o impacto da visão de mundo lúcida e arguta do encenador. Fabiana gugli está esplêndida, cada vez mais precisa e senhora do palco. E também brilham Duda Mamberti e Pancho Capeletti, dominam a cena com extrema segurança. Mas é das idéias do espetáculo que se precisa falar (...) (GUZIK, 2008).
Na primeira versão da blognovela, o próprio Thomas era, ao mesmo tempo, diretor e ator: ele falava como um dos demais personagens e atuava de fato como um diretor dos demais, sendo partícipe da narrativa, mas resguardando-se a posição daquele que determina a direção que a narrativa deveria tomar. Era uma espécie de “Deus intra machina”. A decisão de antropofagizar até mesmo os comentários dos leitores e trazer à luz imagens que são, como dizia Freud, unmheimlich, ou seja, ex-estranhas, foi a decisão de Gerald tomou para unificar e manter sua assinatura própria, seu gesto e escritura autoral. Rui Filho associou a peça à problemática fundamental da identidade (que ligaremos, aqui, com a de autor e autoria):
Tentar diagnosticar nossa identidade, já seria um desafio imensurável. Tratar o diagnóstico, então, pelo prisma da arte, associando esta ao poder, torna a abordagem ainda mais complexa. Tudo inicia na exposição de corpos dependurados. Escolha anunciada do próprio criador. “Porque eu coloquei ali” (...). Como responder, então, o paradoxo entre “a arte tem a cara do poder” e “o poder tem a cara da arte”? O que parece ser a mesma coisa, expõe uma problemática crucial para chegarmos a tal da identidade. Na primeira questão, a arte é colocada como artifício, instrumento de determinação de uma ordem pela subjetividade da estética; na segunda, o poder se fantasia de subjetividade para esconder sua manipulação. Mas nem tão distantes estão. Equilibram-se na existência do próprio homem como fruto responsável por ambas, já que tanto arte quanto o poder são atributos da necessidade humana de superar o meio, seja ele simbólico (e portanto cultural e natural, entendendo que a origem etimológica das duas palavras são a mesma) ou político. E é esse homem, essa figura, transformada em mulher, que vemos surgir da figura do cão. Se deus é o criador de tudo e todos, então a mulher é responsável pela continuidade da vida. É ela igualmente criadora. A humanidade se configura, portanto, na existência da criação como instrumento de adoração do criador. Adoração exposta em desejo ao próprio corpo, como o strip-tease do ator (metáfora da necessidade de abdicarmos de nossas máscaras sociais para nos reencontrarmos puros e originais), como a idolatria ao inacessível, ao inquestionável, ao que cala, representado pelo Santo Graal (face existencial de criador supremo) (FILHO, 2008).
Vale a pena registrar um ponto importante: o fato da dramaturgia ancorar no “autor”, em se tratando de Thomas, não é garantia de não-decifração. O autor mesmo possui diferentes falas conforme o momento. Em algumas situações ele é “O Rebelde Revolucionário do Teatro Carioca”, em outras ele é “Conservador Realista Norte-americano”, em outras ele fala alemão, inglês, francês. Thomas parece vivenciar, enquanto autor, a dissolução do sujeito de que trataram Nietzsche e Foucault.
A virada autoral de Thomas talvez tenha se dado no momento da grande polêmica gerada por Tristão em Isolda em 2003. Naquele momento, o gesto do autor de protestar diante das vaias da audiência foi extensamente noticiado, assumindo maior importância até do que o debate – que deveria acontecer – sobre a montagem. Na montagem, os elementos que surgiam por associação livre adquiriam maior relevância que a narrativa clássica. Podemos dizer que Gerald Thomas é pós-modernista no sentido em que Fredric Jameson analisou essas formas culturais de origem norte-americana em seu livro A Lógica Cultural do Capitalismo Tardio: o pós-modernismo surge como uma aceitação e valorização do momento presente, representando, portanto, um abandono praticamente total das utopias da modernidade. Por isso em seu Tristão e Isolda aparece Freud cheirando cocaína, junto a desfiles de moda, etc. A modernidade (Freud, Wagner) foi ali problematizada e, em boa parte, desconstruída. Sua direção foi entendida no Brasil, muitas vezes, como provocação hermética “chata” ou “pretensiosa”, assim como proclamação do vale-tudo nas artes, o que é um grande equívoco.
Minha hipótese é que, a partir da enorme repercussão do gesto autoral ao final de Tristão e Isolda, Thomas tenha decidido tecer sua obra a partir da autobiografia e dos gestos autorais conscientes. O gesto de protesto do encenador em Tristão e Isolda resultou em um processo para Gerald Thomas, processo ao qual ele respondeu politizando os ataques aos quais foi submetido: a era Lula, do tão esperado governo “de esquerda”, favorecia uma nova censura e acusações de elitismo contra ele. O processo acabou arquivado, mas suponho que, mais do que a visão da queda das Torres Gêmeas em 2001, seja esse fato que pode fazer o papel de navio que nos pode guiar para o maelstrom (redemoinho) que é a obra de Gerald Thomas.
Para uma melhor compreensão dessa obra multifacetada é preciso ouvir a voz do autor. Mas esse é um dos enigmas de Thomas: o próprio autor se define como um significante tantalizado, ou seja: o Holandês Voador. Ele assume uma identidade multinacional, não desejando representar a arte de nenhum país, a não ser, quem sabe, a América mestiça e de muitas vozes. Ele é anfótero: conforme o meio, ele assume o papel de ácido ou de base.
Como comentou o crítico Alberto Guzik, em Kepler Gerald Thomas deixou limpa a cena, deixando a “máquina cênica” quase nua, ele que já elaborou complicadas máquinas cênicas tal como em Carmen com Filtro. Essa clareza cênica não implica a ausência de alguns estilemas que celebrizaram o encenador: a voz em off do encenador que substituiu a voz de um ator que está em cena (Duda Mamberti), o texto oscilando entre a simplicidade e o hermetismo, a iluminação que faz sobressaltar o jogo do claro e escuro, as referências eruditas (Susan Sontag), misturando-se às de massa (Led Zeppelin) e às artes plásticas (Magritte), assim como uma reflexão sobre o poder. A reflexão fáustica sobre o poder é muito presente na obra de Gerald Thomas e ele mesmo assume que não dissocia política e estética, tal como Jameson teoriza em A Lógica Cultural do Pós-Modernismo: a superestrutura, no capitalismo tardio, perdeu boa parte da autonomia anterior.
4 A VOZ AUTORAL EM BATE MAN: O AUTOR COMO ISCA DE SI MESMO
Bate-Man, espetáculo mais recente de Gerald Thomas, revê, com precisas variações, questões que tratamos acima. Nessa peça o autor reflete sobre os processos que fazem sua arte através da apropriação de seu próprio trabalho e de suas criações passadas. Iconoclasta por vocação e desejo, era de se esperar que, em algum momento, fosse ao extremo de si mesmo para se recompor. Muitas são as referências paralelas a montagens recentes. As garrafas vazias (Ventriloqüist), o chão estéril de terra (Nowhere Man), as caixas e o encontro com os segredos históricos metaforizados em seus conteúdos de restos humanos (Circo de Rins e Fígados), o desfile de moda (Nietzsche x Wagner), o porão como lugar não-identificável (O Príncipe de Copacabana), os remédios e vitaminas (Terra em Trânsito), o corpo dependurado pelos pés (O Cão que Insultava Mulheres, Kepler, the Dog). Com paciência, papel e caneta chegaríamos a mais tantas outras. E o que isso quer dizer? Assim como assinala o argumento de Bate Man – o homem isca –, Gerald se fisga num panteão simbólico por ele criado, na última década, onde a construção de vocabulário particular identifica autoria e destreza. Poucos são, verdadeiramente, os artistas a constituírem um discurso preciso e particular, mesmo entre os bons artistas. Quase sempre nos defrontamos com apropriações circunstanciais, estímulos produtificados de alfabetos comuns e gerais. Gerald, não. Faz do palco e cena a expressão de um complexo sistema de metáforas organizadas a partir de percepções próprias dos fatos históricos, reavaliando suas origens através de provocativas reinterpretações sígnicas. O autor, mais do que tudo, conserva os valores deturpando qualquer possibilidade de estagnação histórica, levando os fatos e circunstância a constituírem um elaborado jogo de origens e conseqüências, como que nos avisando de haver muito mais no ontem na constituição do agora. Nessa perspectiva, por que deveria ele abrir mão de si mesmo? Bate Man argumenta, portanto, a favor do autor determinando sua particularidade e individualidade, tanto estética quanto argumentativa, em um panteão contemporâneo estéril de pessoalidades e olhares originais.
As garrafas de vinho tinto espalhadas pela cena oferecem ao espectador a possibilidade de contextualizar-se à história. E não qualquer história. A que nos torna piores do que desejamos ser. São vinhos originados em sangue humano produzidos durante a ascensão e queda do Terceiro Reich. Mas não devemos nos limitar ao tal período. A guerra hitlerista é outra vez argumento simbólico. Gerald fala de todas, identificando o horror inerente ao espectro maior do Holocausto. Assim, o homem isca, retorna à sua função de traduzir o coletivo, a face comum que nos identifica, num jogo metafórico digno de Charles S. Peirce e semioticistas de plantão. Está na guerra a maior atrocidade humana, o princípio destruidor que nos iguala e distancia, paradoxalmente. E Gerald, insistente sobre isso, vem tramando, sucessivamente, espetáculos cujo foco primordial é compreender em que momento desse paradoxo tombamos ao distanciamento. Se por um lado, o teatro reserva a comunhão dionisíaca, por outro, o discurso que se pretende questionador desagrada ouvidos. Gerald se utiliza da artimanha do humor, ou melhor, do ridículo para nos aprisionar interessados. Na construção de circunstâncias absurdas, revela o mais próximo de nossas idiossincrasias. O patético em ser humano. E a culpa histórica e religiosa configurada no absurdo da surdez autista. Um homem banha-se e serve-se voluptuosamente de vinho de sangue humano decorrente de guerras, assassinatos e atrocidades históricas. E rimos disso sem perceber que abrimos diariamente as mesmas garrafas, embriagados que estamos pelas manipulações. Enquanto nos distanciamos do ontem, na perspectiva errônea do novo, prostituímo-nos ao silenciar de toda e qualquer responsabilidade por nossos atos. Sim, nossos. Não o do indivíduo, mas de toda a humanidade. Somos, assim, iscas de um teatro ainda pior, maior, orwelliano. Nas guerras encenadas de Gerald Thomas, a humanidade é culpada por omissão, e em Bate Man, o homem devaneia embriagado pela crueldade da consciência. Como o homem de Dostoiévski, em Notas do Subterrâneo, o de Gerald opta por permanecer isolado, porém bêbado, travestido de estética e futilidade, conduzido ao sofrimento de Prometeu pelo exercício da reflexão.
Gerald exercita um saboroso monólogo sobre o silêncio, apoiado na consistência da trilha de Patrick Grant e das alongadas notas de guitarra. Não há como suprir a voz calada, nem mesmo como calar o som estridente e persistente. Bate Man mostra que estamos afundados em nossas ausências. E nada mais coerente, então, do que o autor, encenador, cenógrafo e iluminador, buscar socorro em si mesmo. O mundo se tornara excessivamente absurdo. E beber sangue humano não me parece nada além de uma possibilidade futura dentre as demais.
Gerald Thomas propõe trocadilhos para além das palavras em seu Bate Man, em cartaz do Espaço Sesc, em Copacabana, como se a ação, ou inação, do homem submetido ao “banho de vinho tinto de sangue” fizesse parte do jogo das inevitabilidades do nosso tempo. O indivíduo, torturado pela banalidade da violência, transformado numa peça de carne pendurada numa exposição de atrocidades, se esvai pelas frestas de uma realidade de sentidos duplos e aparências enganosas, que o imobiliza e atrai a sua perplexidade. Vejamos uma passagem do texto:
(Vira de costas e toma mais banho de vinho.
Murmura pra si mesmo.)
Sabe que… eu acho nunca vi….
Sinceramente.
Eu vou dizer uma coisa para vocês…
Ai…
Sinceramente.
Ai….
(pigarreia algumas vezes, como se preparando para falar.
Murmurando.)
Acho que….
Eu nunca achei que agradar a Burguesia seria desperdiçar aquilo, aquilo que eles acreditam ter de melhor. E agora? Que eu fiz tudo isso aqui.
Qual será a próxima?
(tempo, pensando.
Conclui.)
Um banho de caviar?
Banho de caviar.
(olha para baixo e vê caixas de caviar.
Encontra caixas de caviar.
Se assusta com a surpresa.)
Ahhh (...).
E OLHA QUE LOUCURA ESSA AGORA!
MEU DEUS DO CÉU.
Roupas FASHION!
Não posso acreditar.
Um John Galiano direto da próxima coleção de verão!
WOW!
(entra música. Bate Man se veste e começa a desfilar) (THOMAS, 2008).
Portanto, o que resta a esse homem, bêbedo do real, mas que desconhece as razões para o que vive, encharcado de incoerência e de culpa. No teatro de meias verdades ou de mentiras cínicas, interpreta o papel do bufão ensangüentado que bebe vinhos de safras incontornáveis e participa, como foi visto acima, de patético desfile de moda, numa antropofágica deglutição da imensa solidão do silêncio dos tempos.
Nas metáforas da existência na atualidade, Gerald Thomas não abandona as citações, a busca de representar o momento com fatos do passado, de reinterpretar significados e reverberar a imobilidade ruidosa. A escrita cênica de Gerald Thomas capta a intensidade com que expõe as suas próprias dúvidas e inflexiona a arte contemporânea. A capacidade de criar identidade visual para suas montagens permite que o autor, diretor e cenógrafo deixe, a cada espetáculo, a sua marca também na ambientação. Em Bate Man, a semi-arena coberta de areia, com caixas de vinho espalhadas pelo chão e um simulacro de palco ao fundo, cuja cortina se abre para desvendar atrocidades, confirma a sua mão firme para o desenho da cena.
CONCLUSÃO
A obra de Gerald Thomas é uma obra de signos em rotação. Concluímos aqui que entrou numa rotação ainda mais intensa recentemente, acelerando o seu maelstrom de referências. O “turning point” da obra, supomos, foi o gesto autoral de protesto em Tristão e Isolda. O resultado foi a guinada para relatos intensamente autorais ou até mesmo autobiográficos que realizou o autor em Terra em Trânsito e Rainha Mentira (Queen Liar). Analisamos também, brevemente, a blognovela O cão que atacava mulheres ou: Kepler, the dog, considerada por Gerald Thomas como continuação da trilogia iniciada em Terra em Trânsito e Rainha Mentira. A blognovela passou por uma transformação entre o seu formato original no blog e a encenação. Nessa mudança, investigou-se o traço autoral de Thomas. Ao verter a peça, originalmente apenas literária, para o teatro, Thomas tornou-a algo marcado pela preocupação em, com imagens de pesadelo, buscar mobilizar o inconsciente, refletir as relações entre arte e a política no mundo atual, referindo-se indiretamente a episódios de tortura em Abu Ghraib, por exemplo. Em Bate Man, ele continua esse trabalho autoral de encenação de si mesmo em um monólogo escrito para o ator Marcelo Olinto.
REFERÊNCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ALBUQUERQUE, Severino J. O Teatro Brasileiro na Década de Oitenta. Latin American Review. No. 25.2 (Spring 1992), p. 23-36.
ALCANTARA, Marcelo. Crítica: O cão que insultava as mulheres: Kepler, the dog. Revista Bacante. Disponível em:
BOOTH, The Rethoric of Fiction. Chicago University Press: 1983.
BROOK, Peter. O Teatro e seu Espaço. Rio de Janeiro: Vozes, 1970.
FILHO, Rui. Kepler, o cão atordoado. Disponível em:
FONSECA, Mau. O Teatrocinema da blognovela. Disponível em:
GEORGE, David. Gerald Thomas postmodernist theatre: a wagnerian antropofagia? Luso-brasilian Review, XXXVII, 1998.
GUINSBURG, Jacó et. FERNANDES, Sílvia. Um encenador de si mesmo: Gerald Thomas. São Paulo: Editora Perpectiva, 1996.
GUZIK, Alberto. O Impacto de Kepler. Disponível em:
JAMESON, Fredric. A Lógica Cultural do Capitalismo Tardio. São Paulo: Ática, 1996.
MACKSEN Luiz. Texto pretensioso de Gerald Thomas expõe crueldade de nosso tempo. Disponível em:
REIS, Luís Augusto. Piscator, Brecht, Boal e Artaud – Considerações sobre o teatro político. Disponível em:
THOMAS, Gerald. Press. Disponível em:
sexta-feira, 16 de outubro de 2009
Entrevista de Gerald/comentários de Leo Lama
arta-feira, Outubro 14, 2009
Entrevista de Gerald Thomas ao Jornal “O Globo”, com comentários de Leo Lama
RIO - Gerald Thomas vai deixar o teatro. No mês passado, o diretor que fez da controvérsia seu gênero teatral divulgou pela internet um artigo no qual afirmava que daria adeus ao teatro. "Continuar o quê?", disse ele no artigo; "Se formos analisar o último filme ou CD de fulano de tal, ou a última coreografia de não sei quem, veremos que tudo é uma mera repetição medíocre e menor (...)". Ao GLOBO, por e-mail, o diretor confirma a saída, mas não se será definitiva.
Você vai parar de dirigir? É sua aposentadoria?
GERALD THOMAS: Eu não chamaria de aposentadoria. Aposentadoria implica receber pensão, não? Não é o meu caso. O meu é um pouco mais profundo. Acredite.
LEO LAMA: Eu acredito.
Se é um ''breve'' adeus, como você diz no artigo, você para por um tempo e depois volta?
GERALD: Não tenho nada decretado. Digo no meu artigo que preciso de tempo pra me achar e que não há originalidade alguma na minha geração. Digo que os tempos de hoje estão extremamente chatos, e as verdadeiras estrelas são aquelas fora do teatro: não faz mesmo sentido entreter um pequeno número de pessoas presas em cadeiras, vendo "miragens" no palco. Essa mentirinha está mal contada. E eu parei de contá-la. Mas não estou reclamando: me deram "the time of my life". Tive os melhores teatros do mundo e agradeço a Deus por isso.
LEO LAMA: Que geração é essa, a do Gerald, que se perdeu procurando originalidade? Não há como negar que esses tempos estão chatos, mas e os tempos que não existem nessa chatice como será que estão? Que tempos são esses? Que relógios marcam tais tempos? Quais tempos existem de verdade e na Verdade? Tudo é realtivo, mas o Absoluto não se relativiza com o relativo, ou seja, pra que falar do relativo como se fosse absoluto? Pra que falar do sem sentido se não há sentido algum? (REPOUSO) Então o que Gerald fazia era entreter um pequeno número de pessoas presas em cadeiras que viam “miragens” no palco? E agora, o que se propõe? Que se conte melhor a mentirinha? Ou que se a abandone sem piedade, ainda que as verdadinhas possam não ser essas? (REPOUSO) Teria sido Deus que lhe concedeu os teatros? Se foi, o que Gerald Thomas deu em troca? Uma arte que caiu no ridículo da desistência, na falência, no esgotamento? Que retribuição é essa? É só uma pergunta. Eu não faço críticas, eu apenas formulo questões: ora, O Todo Poderoso já não tinha avisado através de um de seus profetas que já não havia nada de novo debaixo do sol? Ah, essas mentes iluminadas por refletores! O que quer dizer “não há nada de novo sob o sol (ou outras traduções possíveis do Qohélet, como a de Haroldo de Campos: névoas de nadas, disse O-que- sabe, tudo névoa nada. Tudo tédio palavras... e não há nada novo sob sol...)? Se isso é uma coisa que foi proferida e avisada de forma atemporal e simbólica, quando um dia se descobre que não há nada de novo no “teatro”, ou nada de novo a se fazer, ainda que não se tenha feito nada de novo nos anos em que se achava que se fazia novidades, está se falando da mesma falta de novidade a que se refere o Livro Sagrado ou fala-se do que o Livro disse que aconteceria com quem não se deixasse ler pelo Livro? Então pergunto: do que fala Gerald e do que fala o Eclesiastes? Tudo o que possamos fazer já foi feito, “Não há nada de novo sob o Sol”. Tudo é vaidade, diz o Livro. E Gerald parou de contar a mentirinha, ainda que a Verdade já tivesse sido contada há muito, e não por ele, é claro. O que não o desmerece, ainda que se pergunte: o que ele fez para merecer tanto espaço de Deus? O que ele fez com seu tempo de vida? Quando foi que se trocaram os Princípios pela originalidade, a Atualização do Espírito pela novidade? Vai saber. Vai saber.
Vai participar de projetos teatrais fora da direção?
GERALD: Eu parei. Procure me entender. Parei. O Gerald Thomas parou.
LEO LAMA: Parou com o que? O que era “isso” que o Gerald Thomas fazia? Teatro ou aquilo que ele chamava de teatro? O que quer dizer “parei de fazer teatro!”? O que é teatro? O de um é o de todos? Digamos que tal teatro fosse arte. Parou de fazer arte? Mas quando ele começou a fazer arte, se seu teatro for arte e se tal arte é arte? O que é arte? Não estou criticando “sua” arte ou "seu" teatro, estou apenas questionando se o que um “artista” faz é a arte de todos ou é a representação de todas as artes ou de toda a arte. E ainda pergunto se o que enxergamos não é aquilo que conseguimos ver e também se o que vemos não é exatamente aquilo que estamos vendo e nada mais ou a mais. O que ocorre e não estamos vendo? Ah! O que não se vê? O que é o invisível? Quem são os que já viram tudo? Os que sempre vêem as mesmas coisas ou os que possuem o dom de ver na e a totalidade? Gerald Thomas vê por todos ou só por si mesmo? Se é por si que se vê, que diferença faz para nós, se vai parar ou continuar, dizer isso ou aquilo, encenar tal ou tal peça? No entanto “sua” reflexão é importante, ou melhor dizendo, interessante, pois nos faz pensar sobre o que é a crise de um e a crise de todos. A quem damos voz? Há quem nos represente? Um artista representa o que? Uma sociedade? Uma crise geral pode ser medida por uma crise pessoal de um artista que recebeu espaço da mídia durante anos? E os artistas que não foram vistos, não são relevantes, ainda vão ser, ou são relevantes e por isso mesmo não foram vistos por aqueles que achavam que quem tinha que ser visto era Gerald Thomas? Justo este, aquele que não vê mais nada ou viu que nunca viu. Haja vista. (REPOUSO)Sim, podemos dizer que Gerald é o retrato da modernidade, mas quem quer guardar a fotografia desse tempo inócuo? Ele mesmo já não quer. Chafurdar desde o começo no sem sentido para um dia cansar do sem sentido é algum tipo de abandono ou é cair na obviedade abandonável daquilo em que se meteu?
Vai deixar de assistir a peças também?
GERALD: Não quero nem ouvir falar de teatro ou em teatro.
LEO LAMA: Mas e se o teatro for justamente ouvir? Mas e se for ouvir o que não se faz mais? Sem querer dizer o que é e o que não, escuto. A repórter pergunta sobre assistir e Gerald responde que não vai mais ouvir. Onde está o erro, na pergunta ou na resposta? Veremos o teatro sem escuta?
O que você fará a partir de agora? Vai estudar? O quê? Vai viajar? Para onde?
GERALD: Vou trabalhar alguma prosa, pensar na vida. Pensar na vida. Repensar no que aconteceu e onde tudo se perdeu. Porque... te digo com toda a sinceridade: a mediocridade reina, seja na música, seja nas artes plásticas ou no cinema. Então... estamos atravessando um período onde é melhor se calar e... quieto no meu canto, vou pisar em outras calçadas que não NY e Londres, e essas que piso sempre.
LEO LAMA: Precisamos pensar na diferença entre o mundo e a vida. A vida não é o mundo. A vida é verbo, pensar no mundo como se fosse a vida é engano, não vale a pena. A pena valida a vida. Pensar valida o mundo. (REPOUSO) A mediocridade reina no reino da mediocridade, quanto a isto não resta menor dúvida. Há outros reinos? A que rei se quer servir? Sim, é melhor se calar, mas há o que pode ser mais bem dito. Eu nunca quis conhecer Nova Iorque. E o sonho da minha filha é morar em Londres. Isso interessa?
Você fala que não tem vontade de criar um "iTheatro''. As experiências culturais ao vivo, como o teatro, estão em declínio? Quando se vai a um show de música, as pessoas não assistem mais a ele sem fotografar ou filmar. Se pudessem fazer o mesmo com as peças, ajudaria o teatro?
GERALD: Uma de minhas últimas peças foi "Kepler the dog: um cão que insultava mulheres", levada ao ar pelo "Ig". Então, isso, eu já fiz. Foi visto numa noite por mais gente do que uma peça é vista numa temporada inteira. Não culpo o público nunca. Culpo a nós mesmos por não termos tido a coragem de ter ido mais longe: ficamos nessa merda de desconstrutivismo por tempo demais. E deu no que deu. Caiu tudo. A minha geração não tem cultura, falta cultura a essa falta de cultura!
LEO LAMA: Uma pessoa faz merda e por causa disso ninguém mais deve fazer? Será que não existe uma singularidade na merda de cada um? Uma merda vista, todas foram vistas (ou cheiradas)? Sim, "Kepler the dog: um cão que insultava mulheres" a peça do Ig, (ou seria Id?) poderia ser considerada uma merda, ou não, mas por causa dessa merda tudo vira merda? Por que uma quantidade enorme de gente viu a qualidade não pode mais ser vista? Quem ficou nessa merda de desconstrutivismo afinal? Bem, quem realmente ficou muito tempo na merda foi o Derrida. Caiu tudo? Levanta sacode a poeira, da volta por cima, já diria mestre Vanzolini. A verdade é que há muitas gerações sem cultura sobre a falta de cultura, isso não é privilégio do Gerald ou da geração dele, mas eu pergunto: o que foi cultivado?
Como entrar em contato com os que se nivelam pela "culturazinha de merda'', como você diz no seu artigo? A sua geração artística não teria conseguido lidar com isso?
GERALD: Não competíamos com a internet ou a TV a cabo e o Twitter e o celular que manda text message, e isso e aquilo. Isso tudo afasta qualquer pessoa da arte. Seja a arte que for. Havia um tempo para ser dedicado à arte. Havia uma imprensa que nos apoiava aqui em NY. Hoje a imprensa que resta (o "Village Voice") virou um bando de anúncio de travestis.
LEO LAMA: É essa tecnologia toda que afasta as pessoas da arte ou é a arte que é feita que afasta as pessoas da arte? Eis o paradoxo de Tostines. A arte precisa das pessoas ou as pessoas precisam da arte? O que é arte? Eis de novo a impertinente questão.
Acha que esse nivelamento por baixo, esse esvaziamento da arte, poderia se ligar a um também esvaziamento da política? Assim como as pessoas não teriam mais paixões políticas, estariam mais cínicas também para uma discussão da cultura?
GERALD: Como assim "não têm paixões políticas"? Coloquei toda a minha energia na campanha do presidente Obama ano passado. E acho ótimo ter feito isso!!!!! Aqui, nos EUA, não há cinismo algum em relação à política, e sim, um tremendo renascimento político. Não cultural. Mas político, sim.
LEO LAMA: Sim, tais paixões e outras patologias não faltam.
Sua decisão de abandonar o teatro parece vir de um processo longo de reflexão. Mas houve algum acontecimento que tenha servido de gota d'água, de catalisador para essa sua decisão? O que foi?
GERALD: Foi há um mês, quando estive em Amsterdã pela 30 vez e vi um dos auto retratos de Rembrandt. Aquele que ele pintou aos 55 anos. Eu estou com 55 anos. Nos comunicamos através de um estranho olhar. Ele num tempo, e eu, num outro, divididos por 400 anos. Fiquei de tal forma emocionado com aquele quadro (que conheço a minha vida inteira) que dessa vez algo em mim simplesmente se quebrou.
LEO LAMA: O que disse o olhar de Rembrandt além de sua idade (seu tempo)? O que nem em 400 anos poderá se colar? (REPOUSO) Onde estão as estrelas?
Postado por Leo Lama às 2:17 AM
10 comentários:
Andréah disse...
(se Gerald Tomas não tivesse publicado este artigo... eu aplaudia de pé, pela primeira vez, diga-se, essa atitude não-artistica que por isso mesmo, tempos de hoje, é que vai sendo Artisticamente justa... É que por razões diversas, em muitos pontos, eu coaduno, mesmo concordando com o que você Leo, comenta... é que há além dos pontos divergentes, um mal estar unico... só que por ironia da trama desta-vida-conjunta, ontem mesmo, acabava de tomar contato com este trechinho que o fio da minha meada descostura lentamente...
Vê: ...“se a razão motivadora para que eu devolva a John o livro [emprestado] no tempo combinado não é minha consideração por ele, mas minha decisão de viver de acordo com o princípio geral de que promessas devem ser cumpridas, meu ato não é moral, mas moralista”.) Uma ação moral não “serve” a “propósito” algum e certamente não é guiada pela expectativa de lucro, conforto, notoriedade, reforço do ego, aplauso público ou qualquer outro tipo de autopromoção. Embora seja verdade que feitos “objetivamente bons”, isto é, proveitosos e úteis, têm sido realizados continuamente a partir do cálculo de ganhos do ator – seja obter a divina graça, comprar a estima do público ou mostrar arrependimento para ganhar a absolvição dos pecados e o perdão divino por atos insensíveis ou sem piedade em outras ocasiões –, eles não poderiam ser classificados como genuinamente morais porque foram motivados dessa forma..." (mais pra frente, o autor completa:) "Essa é uma razão crucial pela qual a demanda ética, aquela pressão “objetiva” a ser moral que emana do próprio fato de estar vivo e compartilhar o planeta com outros seres vivos, é e deve permanecer silenciosa."
... ...
... de tudo o mais que aqui eu vi e ouvi, quem gritou silenciosamente de maneira contundente foi a propria Arte, pra minha plena alegria... espelhando o que no espelho mesmo, Gerald nunca poderia ver aparente... Tomara a gente faça um coro silencioso de ações pro Teatro poder ser ouvido, sempre...
Dorim.
12:34 AM
Edu disse...
Esse Gerald Thomas é o tipo do bitoladinho de cidade grande. "Não tem mais música, não tem mais filme... buááá... buááá..."
Qualquer curva de rio tem mais novidade que toda a nossa perversão cultural.
Quem procura novidade é porque envelheceu em definitivo.
Você nem deveria tocar nesse assunto, Lama, falar de um tonto mimado desses. Nem eu. O mundo dele se resume a NY e Londres, coitado. Aí é que não dá pra ter novidade nenhuma, mesmo, nunca.
1:35 PM
E. Fields disse...
Vou aproveitar este espaço pra dizer o que penso de Geraldo Thomas:
1:42 PM
Líbio Santeleno disse...
Cena 1: Geraldinho está à toa em Amsterdão, fumando e gastando uns cobres que mamãe deixou na lata da cozinha. Vai até o museu e vê um auto-retrato de Rembrandt. Resolve se emocionar. É tão inteligente e culto se emocionar com Rembrandt ! Ele pensa: vou dizer pra todo o mundo que parei. (Ao fundo, ouve-se aquela velha canção, na linda voz de Ney Matogrosso, que diz a mesma coisa: '...eu parei...')
Cena 2: Geraldinho está impaciente, de banho tomado, fuma e anda pra lá e pra cá em seu lindo apartamento no Rio de Janeiro. Ele pensa: eu parei, eu parei, preciso dizer que parei. Vou ligar pra Sandrinha e dizer pra ela que parei. (Sandrinha sendo uma amiga jornalista d'O Globo.)
Cena 3: Sandrinha encontra o impaciente Geraldo, de 55 anos, numa lanchonete do Leblon.
- Eu parei, Sandrinha, você não está entendendo, eu parei !
- Se parou, tá parado, pra quê tocar no assunto ? Não há nada pra entender.
Ele a encara por um caco de segundo, então sente que alguma coisa se quebrou dentro dele:
- Eu não consigo.
E desata a chorar feito uma criança.
Cena 4: Geraldo acorda subitamente, naquela mesma noite, em sua cama, em seu lindo apartamento do Rio de Janeiro. Tem um único pensamento:
Olimpíada 2016 ! Da Grécia para o Rio de janeiro ! Como o teatro !
2:05 PM
Anônimo disse...
Não com cordo com a Andreah, aplaudir de pé atitude de covardia é covardia também. A vida é difícil e sempre será, a secura e a aridez está aí e vai piorar, os artistas devem ser artistas em suas expressões até o fim de suas vidas. ë obrigação de um artistas se renovar, mas antes de tudo, ser artista ë ter o que dizer, ë ter o que acrescentar, ou então, vá dirigir as olimpíadas, como sugeriu o amigo aí em cima.
Rogério
3:19 PM
Duda disse...
Gostei da reflexão do Leo, e acho que dialogar com as pessoas que querem expor suas decisões como se fossem importantes, é importante, pois esvaziar os discursos vazios é um dever do artista.Assim como enche-los. Acho que o que disse o Fields:() é no fundo o que tem-se a dizer mesmo, mas é importante mostrar que os discursos da mídia, na maioria das vezes não passam de umm amontoado de abobrinhas egóicas. Vi uma entrevista do Gerald da Maria Gabriela há uns anos atrás, o cara só fazia fazer apologia ao Rivotril. O pior é que esses discursos, não falo nem da pessoa, são como o Jason, nunca morrem. Devo concordar com o Leo quando ele diz que os jornalistas, ou o jornalismo sõa idiotas, porque parece que todas as notícias são a mesma, ou seja, é tudo notícia do mesmo vazio.
Blargh!
3:29 PM
Adriana disse...
Acho Rembrandt pintor de uma arte menor. Pode ser só opinião minha, mas vejo certas conexões entre as escolhas que fazemos e as coisas que nos emocionam. Acho essa coisa de auto-retrato uma merda. Pra que ficar se auto-retratando?
3:33 PM
Anônimo disse...
A gente se destrata demais, auto-retrato é coisa boa.
4:56 PM
Andréah disse...
(o olhar deste quadro é flecha: contundência da ironia resignada, por 400 anos! Fiquei botando reparo um tempão na força dessa expressão...)
Não aplaudi, Rogério, aplaudiria se. Não a covardia, mas a "negação" do que está posto, o não-acomodamento, a necessidade de por as barbas de molho, a fragilidade, a humildade para a reavaliação de si... e principalmente, aplaudiria a tirada da máscara de tantos anos, aquela que mais o assegurava... Não estaria assim se renovando? Aplaudiria a coragem: isso sim ... se tudo isso fosse um impulso pelo Bem do Outro... não um discurso público...
Aplaudiria não com palmas, nem com louros... Não haveria "espetáculo", entende? Atentaria: a expressão do artista nascendo perante o Outro... ! Era caso pra olhar de sorriso aliviado... Quase um brinde com o olho no olho do olho...
...
... Pra que o Rembrandt foi fazer auto retrato? (vixe Maria!) Pra acordar o Gerald Thomas! rsrs... Num tá de bom tamanho? (to brincando...)
...
2:56 AM
Priscilla disse...
Eu, artista em crise, elocubro com outros artistas acerca da falta de sentido, da busca pelo sentido, do que é sentido. Justo. Mas é como se eu, médico em crise, pensasse a medicina sem diálogo com o paciente. Que sentido há em um público que não se vê, que não tem "cultura", mas que já não sei quem é? Pra quem desejo falar? O que sua ausência quer nos dizer? Como obter respostas sem olhar para fora de mim e dos meus colegas? Objetiva e profundamente? Perdoe-me, Geraldo, mas se estamos sozinhos, encerrados em nós mesmos, continuaremos sem arte. Nós e eles.
1:18 PM
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Entrevista de Gerald Thomas ao Jornal “O Globo”, com comentários de Leo Lama
RIO - Gerald Thomas vai deixar o teatro. No mês passado, o diretor que fez da controvérsia seu gênero teatral divulgou pela internet um artigo no qual afirmava que daria adeus ao teatro. "Continuar o quê?", disse ele no artigo; "Se formos analisar o último filme ou CD de fulano de tal, ou a última coreografia de não sei quem, veremos que tudo é uma mera repetição medíocre e menor (...)". Ao GLOBO, por e-mail, o diretor confirma a saída, mas não se será definitiva.
Você vai parar de dirigir? É sua aposentadoria?
GERALD THOMAS: Eu não chamaria de aposentadoria. Aposentadoria implica receber pensão, não? Não é o meu caso. O meu é um pouco mais profundo. Acredite.
LEO LAMA: Eu acredito.
Se é um ''breve'' adeus, como você diz no artigo, você para por um tempo e depois volta?
GERALD: Não tenho nada decretado. Digo no meu artigo que preciso de tempo pra me achar e que não há originalidade alguma na minha geração. Digo que os tempos de hoje estão extremamente chatos, e as verdadeiras estrelas são aquelas fora do teatro: não faz mesmo sentido entreter um pequeno número de pessoas presas em cadeiras, vendo "miragens" no palco. Essa mentirinha está mal contada. E eu parei de contá-la. Mas não estou reclamando: me deram "the time of my life". Tive os melhores teatros do mundo e agradeço a Deus por isso.
LEO LAMA: Que geração é essa, a do Gerald, que se perdeu procurando originalidade? Não há como negar que esses tempos estão chatos, mas e os tempos que não existem nessa chatice como será que estão? Que tempos são esses? Que relógios marcam tais tempos? Quais tempos existem de verdade e na Verdade? Tudo é realtivo, mas o Absoluto não se relativiza com o relativo, ou seja, pra que falar do relativo como se fosse absoluto? Pra que falar do sem sentido se não há sentido algum? (REPOUSO) Então o que Gerald fazia era entreter um pequeno número de pessoas presas em cadeiras que viam “miragens” no palco? E agora, o que se propõe? Que se conte melhor a mentirinha? Ou que se a abandone sem piedade, ainda que as verdadinhas possam não ser essas? (REPOUSO) Teria sido Deus que lhe concedeu os teatros? Se foi, o que Gerald Thomas deu em troca? Uma arte que caiu no ridículo da desistência, na falência, no esgotamento? Que retribuição é essa? É só uma pergunta. Eu não faço críticas, eu apenas formulo questões: ora, O Todo Poderoso já não tinha avisado através de um de seus profetas que já não havia nada de novo debaixo do sol? Ah, essas mentes iluminadas por refletores! O que quer dizer “não há nada de novo sob o sol (ou outras traduções possíveis do Qohélet, como a de Haroldo de Campos: névoas de nadas, disse O-que- sabe, tudo névoa nada. Tudo tédio palavras... e não há nada novo sob sol...)? Se isso é uma coisa que foi proferida e avisada de forma atemporal e simbólica, quando um dia se descobre que não há nada de novo no “teatro”, ou nada de novo a se fazer, ainda que não se tenha feito nada de novo nos anos em que se achava que se fazia novidades, está se falando da mesma falta de novidade a que se refere o Livro Sagrado ou fala-se do que o Livro disse que aconteceria com quem não se deixasse ler pelo Livro? Então pergunto: do que fala Gerald e do que fala o Eclesiastes? Tudo o que possamos fazer já foi feito, “Não há nada de novo sob o Sol”. Tudo é vaidade, diz o Livro. E Gerald parou de contar a mentirinha, ainda que a Verdade já tivesse sido contada há muito, e não por ele, é claro. O que não o desmerece, ainda que se pergunte: o que ele fez para merecer tanto espaço de Deus? O que ele fez com seu tempo de vida? Quando foi que se trocaram os Princípios pela originalidade, a Atualização do Espírito pela novidade? Vai saber. Vai saber.
Vai participar de projetos teatrais fora da direção?
GERALD: Eu parei. Procure me entender. Parei. O Gerald Thomas parou.
LEO LAMA: Parou com o que? O que era “isso” que o Gerald Thomas fazia? Teatro ou aquilo que ele chamava de teatro? O que quer dizer “parei de fazer teatro!”? O que é teatro? O de um é o de todos? Digamos que tal teatro fosse arte. Parou de fazer arte? Mas quando ele começou a fazer arte, se seu teatro for arte e se tal arte é arte? O que é arte? Não estou criticando “sua” arte ou "seu" teatro, estou apenas questionando se o que um “artista” faz é a arte de todos ou é a representação de todas as artes ou de toda a arte. E ainda pergunto se o que enxergamos não é aquilo que conseguimos ver e também se o que vemos não é exatamente aquilo que estamos vendo e nada mais ou a mais. O que ocorre e não estamos vendo? Ah! O que não se vê? O que é o invisível? Quem são os que já viram tudo? Os que sempre vêem as mesmas coisas ou os que possuem o dom de ver na e a totalidade? Gerald Thomas vê por todos ou só por si mesmo? Se é por si que se vê, que diferença faz para nós, se vai parar ou continuar, dizer isso ou aquilo, encenar tal ou tal peça? No entanto “sua” reflexão é importante, ou melhor dizendo, interessante, pois nos faz pensar sobre o que é a crise de um e a crise de todos. A quem damos voz? Há quem nos represente? Um artista representa o que? Uma sociedade? Uma crise geral pode ser medida por uma crise pessoal de um artista que recebeu espaço da mídia durante anos? E os artistas que não foram vistos, não são relevantes, ainda vão ser, ou são relevantes e por isso mesmo não foram vistos por aqueles que achavam que quem tinha que ser visto era Gerald Thomas? Justo este, aquele que não vê mais nada ou viu que nunca viu. Haja vista. (REPOUSO)Sim, podemos dizer que Gerald é o retrato da modernidade, mas quem quer guardar a fotografia desse tempo inócuo? Ele mesmo já não quer. Chafurdar desde o começo no sem sentido para um dia cansar do sem sentido é algum tipo de abandono ou é cair na obviedade abandonável daquilo em que se meteu?
Vai deixar de assistir a peças também?
GERALD: Não quero nem ouvir falar de teatro ou em teatro.
LEO LAMA: Mas e se o teatro for justamente ouvir? Mas e se for ouvir o que não se faz mais? Sem querer dizer o que é e o que não, escuto. A repórter pergunta sobre assistir e Gerald responde que não vai mais ouvir. Onde está o erro, na pergunta ou na resposta? Veremos o teatro sem escuta?
O que você fará a partir de agora? Vai estudar? O quê? Vai viajar? Para onde?
GERALD: Vou trabalhar alguma prosa, pensar na vida. Pensar na vida. Repensar no que aconteceu e onde tudo se perdeu. Porque... te digo com toda a sinceridade: a mediocridade reina, seja na música, seja nas artes plásticas ou no cinema. Então... estamos atravessando um período onde é melhor se calar e... quieto no meu canto, vou pisar em outras calçadas que não NY e Londres, e essas que piso sempre.
LEO LAMA: Precisamos pensar na diferença entre o mundo e a vida. A vida não é o mundo. A vida é verbo, pensar no mundo como se fosse a vida é engano, não vale a pena. A pena valida a vida. Pensar valida o mundo. (REPOUSO) A mediocridade reina no reino da mediocridade, quanto a isto não resta menor dúvida. Há outros reinos? A que rei se quer servir? Sim, é melhor se calar, mas há o que pode ser mais bem dito. Eu nunca quis conhecer Nova Iorque. E o sonho da minha filha é morar em Londres. Isso interessa?
Você fala que não tem vontade de criar um "iTheatro''. As experiências culturais ao vivo, como o teatro, estão em declínio? Quando se vai a um show de música, as pessoas não assistem mais a ele sem fotografar ou filmar. Se pudessem fazer o mesmo com as peças, ajudaria o teatro?
GERALD: Uma de minhas últimas peças foi "Kepler the dog: um cão que insultava mulheres", levada ao ar pelo "Ig". Então, isso, eu já fiz. Foi visto numa noite por mais gente do que uma peça é vista numa temporada inteira. Não culpo o público nunca. Culpo a nós mesmos por não termos tido a coragem de ter ido mais longe: ficamos nessa merda de desconstrutivismo por tempo demais. E deu no que deu. Caiu tudo. A minha geração não tem cultura, falta cultura a essa falta de cultura!
LEO LAMA: Uma pessoa faz merda e por causa disso ninguém mais deve fazer? Será que não existe uma singularidade na merda de cada um? Uma merda vista, todas foram vistas (ou cheiradas)? Sim, "Kepler the dog: um cão que insultava mulheres" a peça do Ig, (ou seria Id?) poderia ser considerada uma merda, ou não, mas por causa dessa merda tudo vira merda? Por que uma quantidade enorme de gente viu a qualidade não pode mais ser vista? Quem ficou nessa merda de desconstrutivismo afinal? Bem, quem realmente ficou muito tempo na merda foi o Derrida. Caiu tudo? Levanta sacode a poeira, da volta por cima, já diria mestre Vanzolini. A verdade é que há muitas gerações sem cultura sobre a falta de cultura, isso não é privilégio do Gerald ou da geração dele, mas eu pergunto: o que foi cultivado?
Como entrar em contato com os que se nivelam pela "culturazinha de merda'', como você diz no seu artigo? A sua geração artística não teria conseguido lidar com isso?
GERALD: Não competíamos com a internet ou a TV a cabo e o Twitter e o celular que manda text message, e isso e aquilo. Isso tudo afasta qualquer pessoa da arte. Seja a arte que for. Havia um tempo para ser dedicado à arte. Havia uma imprensa que nos apoiava aqui em NY. Hoje a imprensa que resta (o "Village Voice") virou um bando de anúncio de travestis.
LEO LAMA: É essa tecnologia toda que afasta as pessoas da arte ou é a arte que é feita que afasta as pessoas da arte? Eis o paradoxo de Tostines. A arte precisa das pessoas ou as pessoas precisam da arte? O que é arte? Eis de novo a impertinente questão.
Acha que esse nivelamento por baixo, esse esvaziamento da arte, poderia se ligar a um também esvaziamento da política? Assim como as pessoas não teriam mais paixões políticas, estariam mais cínicas também para uma discussão da cultura?
GERALD: Como assim "não têm paixões políticas"? Coloquei toda a minha energia na campanha do presidente Obama ano passado. E acho ótimo ter feito isso!!!!! Aqui, nos EUA, não há cinismo algum em relação à política, e sim, um tremendo renascimento político. Não cultural. Mas político, sim.
LEO LAMA: Sim, tais paixões e outras patologias não faltam.
Sua decisão de abandonar o teatro parece vir de um processo longo de reflexão. Mas houve algum acontecimento que tenha servido de gota d'água, de catalisador para essa sua decisão? O que foi?
GERALD: Foi há um mês, quando estive em Amsterdã pela 30 vez e vi um dos auto retratos de Rembrandt. Aquele que ele pintou aos 55 anos. Eu estou com 55 anos. Nos comunicamos através de um estranho olhar. Ele num tempo, e eu, num outro, divididos por 400 anos. Fiquei de tal forma emocionado com aquele quadro (que conheço a minha vida inteira) que dessa vez algo em mim simplesmente se quebrou.
LEO LAMA: O que disse o olhar de Rembrandt além de sua idade (seu tempo)? O que nem em 400 anos poderá se colar? (REPOUSO) Onde estão as estrelas?
Postado por Leo Lama às 2:17 AM
10 comentários:
Andréah disse...
(se Gerald Tomas não tivesse publicado este artigo... eu aplaudia de pé, pela primeira vez, diga-se, essa atitude não-artistica que por isso mesmo, tempos de hoje, é que vai sendo Artisticamente justa... É que por razões diversas, em muitos pontos, eu coaduno, mesmo concordando com o que você Leo, comenta... é que há além dos pontos divergentes, um mal estar unico... só que por ironia da trama desta-vida-conjunta, ontem mesmo, acabava de tomar contato com este trechinho que o fio da minha meada descostura lentamente...
Vê: ...“se a razão motivadora para que eu devolva a John o livro [emprestado] no tempo combinado não é minha consideração por ele, mas minha decisão de viver de acordo com o princípio geral de que promessas devem ser cumpridas, meu ato não é moral, mas moralista”.) Uma ação moral não “serve” a “propósito” algum e certamente não é guiada pela expectativa de lucro, conforto, notoriedade, reforço do ego, aplauso público ou qualquer outro tipo de autopromoção. Embora seja verdade que feitos “objetivamente bons”, isto é, proveitosos e úteis, têm sido realizados continuamente a partir do cálculo de ganhos do ator – seja obter a divina graça, comprar a estima do público ou mostrar arrependimento para ganhar a absolvição dos pecados e o perdão divino por atos insensíveis ou sem piedade em outras ocasiões –, eles não poderiam ser classificados como genuinamente morais porque foram motivados dessa forma..." (mais pra frente, o autor completa:) "Essa é uma razão crucial pela qual a demanda ética, aquela pressão “objetiva” a ser moral que emana do próprio fato de estar vivo e compartilhar o planeta com outros seres vivos, é e deve permanecer silenciosa."
... ...
... de tudo o mais que aqui eu vi e ouvi, quem gritou silenciosamente de maneira contundente foi a propria Arte, pra minha plena alegria... espelhando o que no espelho mesmo, Gerald nunca poderia ver aparente... Tomara a gente faça um coro silencioso de ações pro Teatro poder ser ouvido, sempre...
Dorim.
12:34 AM
Edu disse...
Esse Gerald Thomas é o tipo do bitoladinho de cidade grande. "Não tem mais música, não tem mais filme... buááá... buááá..."
Qualquer curva de rio tem mais novidade que toda a nossa perversão cultural.
Quem procura novidade é porque envelheceu em definitivo.
Você nem deveria tocar nesse assunto, Lama, falar de um tonto mimado desses. Nem eu. O mundo dele se resume a NY e Londres, coitado. Aí é que não dá pra ter novidade nenhuma, mesmo, nunca.
1:35 PM
E. Fields disse...
Vou aproveitar este espaço pra dizer o que penso de Geraldo Thomas:
1:42 PM
Líbio Santeleno disse...
Cena 1: Geraldinho está à toa em Amsterdão, fumando e gastando uns cobres que mamãe deixou na lata da cozinha. Vai até o museu e vê um auto-retrato de Rembrandt. Resolve se emocionar. É tão inteligente e culto se emocionar com Rembrandt ! Ele pensa: vou dizer pra todo o mundo que parei. (Ao fundo, ouve-se aquela velha canção, na linda voz de Ney Matogrosso, que diz a mesma coisa: '...eu parei...')
Cena 2: Geraldinho está impaciente, de banho tomado, fuma e anda pra lá e pra cá em seu lindo apartamento no Rio de Janeiro. Ele pensa: eu parei, eu parei, preciso dizer que parei. Vou ligar pra Sandrinha e dizer pra ela que parei. (Sandrinha sendo uma amiga jornalista d'O Globo.)
Cena 3: Sandrinha encontra o impaciente Geraldo, de 55 anos, numa lanchonete do Leblon.
- Eu parei, Sandrinha, você não está entendendo, eu parei !
- Se parou, tá parado, pra quê tocar no assunto ? Não há nada pra entender.
Ele a encara por um caco de segundo, então sente que alguma coisa se quebrou dentro dele:
- Eu não consigo.
E desata a chorar feito uma criança.
Cena 4: Geraldo acorda subitamente, naquela mesma noite, em sua cama, em seu lindo apartamento do Rio de Janeiro. Tem um único pensamento:
Olimpíada 2016 ! Da Grécia para o Rio de janeiro ! Como o teatro !
2:05 PM
Anônimo disse...
Não com cordo com a Andreah, aplaudir de pé atitude de covardia é covardia também. A vida é difícil e sempre será, a secura e a aridez está aí e vai piorar, os artistas devem ser artistas em suas expressões até o fim de suas vidas. ë obrigação de um artistas se renovar, mas antes de tudo, ser artista ë ter o que dizer, ë ter o que acrescentar, ou então, vá dirigir as olimpíadas, como sugeriu o amigo aí em cima.
Rogério
3:19 PM
Duda disse...
Gostei da reflexão do Leo, e acho que dialogar com as pessoas que querem expor suas decisões como se fossem importantes, é importante, pois esvaziar os discursos vazios é um dever do artista.Assim como enche-los. Acho que o que disse o Fields:() é no fundo o que tem-se a dizer mesmo, mas é importante mostrar que os discursos da mídia, na maioria das vezes não passam de umm amontoado de abobrinhas egóicas. Vi uma entrevista do Gerald da Maria Gabriela há uns anos atrás, o cara só fazia fazer apologia ao Rivotril. O pior é que esses discursos, não falo nem da pessoa, são como o Jason, nunca morrem. Devo concordar com o Leo quando ele diz que os jornalistas, ou o jornalismo sõa idiotas, porque parece que todas as notícias são a mesma, ou seja, é tudo notícia do mesmo vazio.
Blargh!
3:29 PM
Adriana disse...
Acho Rembrandt pintor de uma arte menor. Pode ser só opinião minha, mas vejo certas conexões entre as escolhas que fazemos e as coisas que nos emocionam. Acho essa coisa de auto-retrato uma merda. Pra que ficar se auto-retratando?
3:33 PM
Anônimo disse...
A gente se destrata demais, auto-retrato é coisa boa.
4:56 PM
Andréah disse...
(o olhar deste quadro é flecha: contundência da ironia resignada, por 400 anos! Fiquei botando reparo um tempão na força dessa expressão...)
Não aplaudi, Rogério, aplaudiria se. Não a covardia, mas a "negação" do que está posto, o não-acomodamento, a necessidade de por as barbas de molho, a fragilidade, a humildade para a reavaliação de si... e principalmente, aplaudiria a tirada da máscara de tantos anos, aquela que mais o assegurava... Não estaria assim se renovando? Aplaudiria a coragem: isso sim ... se tudo isso fosse um impulso pelo Bem do Outro... não um discurso público...
Aplaudiria não com palmas, nem com louros... Não haveria "espetáculo", entende? Atentaria: a expressão do artista nascendo perante o Outro... ! Era caso pra olhar de sorriso aliviado... Quase um brinde com o olho no olho do olho...
...
... Pra que o Rembrandt foi fazer auto retrato? (vixe Maria!) Pra acordar o Gerald Thomas! rsrs... Num tá de bom tamanho? (to brincando...)
...
2:56 AM
Priscilla disse...
Eu, artista em crise, elocubro com outros artistas acerca da falta de sentido, da busca pelo sentido, do que é sentido. Justo. Mas é como se eu, médico em crise, pensasse a medicina sem diálogo com o paciente. Que sentido há em um público que não se vê, que não tem "cultura", mas que já não sei quem é? Pra quem desejo falar? O que sua ausência quer nos dizer? Como obter respostas sem olhar para fora de mim e dos meus colegas? Objetiva e profundamente? Perdoe-me, Geraldo, mas se estamos sozinhos, encerrados em nós mesmos, continuaremos sem arte. Nós e eles.
1:18 PM
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sexta-feira, 25 de setembro de 2009
Mais um assassinato dos golpistas
jueves 24 de septiembre de 2009
El espanto
Un adolescente murió ayer en la tarde luego que gritara “golpistas” a un grupo de policías que se transportaban en la patrulla 4-10, informaron familiares y vecinos que presenciaron el crimen.
La víctima fue identificada como Elvis Jacobo Euceda Perdomo, de 18 años, quien murió en la colonia Las Colinas, de la aldea del Carmen de dos disparos de fusil.
El joven, que se dedicaba a halar leña de un cerro cercano a la colonia para agenciarse algún dinero, en el momento del percance iba montado en una bicicleta color rojo. El se dirigía a jugar al campo de fútbol.El personal que hizo el levantamiento encontró este casquillo de Galil, el arma oficial de la policía.Según testigos, el crimen sucedió cuando el adolescente pasó cerca de la patrulla y gritó “golpistas”.
En ese momento uno de los policías (que no fue identificado por su apellido) se bajó del vehículo y disparó el fusil que portaba contra la humanidad del muchacho, que iba a unos 70 metros de distancia.Los disparos impactaron en la cabeza y espalda. Por mientras llegaban las autoridades a hacer el reconocimiento del cadáver, los familiares taparon a su pariente con una sábana color blanco.
Redacción de Diario El Tiempo, San Pedro Sula
Publicado por Fabricio Estrada en 20:33 0 comentarios Enlaces a esta entrada
Susurro
Hablamos con Esteban, burbujas, vaho del ártico son nuestras palabras.
Canción de exilio para un recién nacido
Y es peor todavía:
uno defiende un sueño,
a una tierra que apenas existe en el deseo.
Por eso las piedras son indefendibles
y el inmediato yermo
no es la tierra que fértil buscamos.
Nada parece más cercano
que la extrema presunción de la memoria,
hilos que desde nuestras manos
pretenden devolver vida
a lo que en sustancia
siempre será fugacidad e intermitencia.
Y sin embargo, pequeño,
hoy te hago parte de la nostalgia,
así, dormido,
mientras en sueños fundás la patria
que aún no he podido fundarte.
II
Pero no he querido para vos, hijo mío,
un destino injurioso de ayes y bemoles,
este sarmiento que trenzo
cada mañana en mis manos.
Has de saber
que mis juegos tienen perdedores
y que lastimo de vez en cuando
como un desconocido que grita a otro
y lo humilla
y se complace con verlo solo, aterido
golpeando en los rincones.
Tenés que saber que trato, que intento
que hago lo posible por llegar limpio a vos
y recibir de tus medias palabras
esa verdad que en las noches
hablará con claridad en mis sueños.
Es probable que no me entendás,
balbuceo y lloro
con un espino plantado en mi lengua.
Sólo dejame crecer un poco más
para poder explicártelo.
El espanto
Un adolescente murió ayer en la tarde luego que gritara “golpistas” a un grupo de policías que se transportaban en la patrulla 4-10, informaron familiares y vecinos que presenciaron el crimen.
La víctima fue identificada como Elvis Jacobo Euceda Perdomo, de 18 años, quien murió en la colonia Las Colinas, de la aldea del Carmen de dos disparos de fusil.
El joven, que se dedicaba a halar leña de un cerro cercano a la colonia para agenciarse algún dinero, en el momento del percance iba montado en una bicicleta color rojo. El se dirigía a jugar al campo de fútbol.El personal que hizo el levantamiento encontró este casquillo de Galil, el arma oficial de la policía.Según testigos, el crimen sucedió cuando el adolescente pasó cerca de la patrulla y gritó “golpistas”.
En ese momento uno de los policías (que no fue identificado por su apellido) se bajó del vehículo y disparó el fusil que portaba contra la humanidad del muchacho, que iba a unos 70 metros de distancia.Los disparos impactaron en la cabeza y espalda. Por mientras llegaban las autoridades a hacer el reconocimiento del cadáver, los familiares taparon a su pariente con una sábana color blanco.
Redacción de Diario El Tiempo, San Pedro Sula
Publicado por Fabricio Estrada en 20:33 0 comentarios Enlaces a esta entrada
Susurro
Hablamos con Esteban, burbujas, vaho del ártico son nuestras palabras.
Canción de exilio para un recién nacido
Y es peor todavía:
uno defiende un sueño,
a una tierra que apenas existe en el deseo.
Por eso las piedras son indefendibles
y el inmediato yermo
no es la tierra que fértil buscamos.
Nada parece más cercano
que la extrema presunción de la memoria,
hilos que desde nuestras manos
pretenden devolver vida
a lo que en sustancia
siempre será fugacidad e intermitencia.
Y sin embargo, pequeño,
hoy te hago parte de la nostalgia,
así, dormido,
mientras en sueños fundás la patria
que aún no he podido fundarte.
II
Pero no he querido para vos, hijo mío,
un destino injurioso de ayes y bemoles,
este sarmiento que trenzo
cada mañana en mis manos.
Has de saber
que mis juegos tienen perdedores
y que lastimo de vez en cuando
como un desconocido que grita a otro
y lo humilla
y se complace con verlo solo, aterido
golpeando en los rincones.
Tenés que saber que trato, que intento
que hago lo posible por llegar limpio a vos
y recibir de tus medias palabras
esa verdad que en las noches
hablará con claridad en mis sueños.
Es probable que no me entendás,
balbuceo y lloro
con un espino plantado en mi lengua.
Sólo dejame crecer un poco más
para poder explicártelo.
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quinta-feira, 24 de setembro de 2009
Já são 89 dias do golpe militar em Honduras
Jueves 24 de septiembre de 2009
a 89 días del golpe de estado militar en Honduras
Hola amigos, pues aquí estamos muy bien y sanos y salvos a pesar de que en la ciudad capital Tegucigalpa ha sido el blanco de brutal represión por parte de las fuerzas policiales y militares. En especial los jóvenes que marchan con “La Resistencia”, no se si llamarle masoquismo o indignación pues cuando ocurren hechos contra los manifestantes queriendo ingresar a la Colonia Palmira mas personas se unen a la causa, también les informo que “la resistencia” está en cada uno de los barrios y colonias capitalinas, una especie de barricadas ya que no se está dejando el libre paso por las principales calles de la ciudad.
Estos últimos tres días (21 – 23 septiembre) hemos estado todos los hondureños presos en nuestros propios hogares desde Islas de La Bahía hasta Choluteca y de Copan a Gracias a Dios. Desde el lunes a las 4 pm hemos estado en toque de queda tras toque de queda. Que ha sido incumplido por quienes no reconocen estas autoridades y en su justa razón y apego al artículo 3 de la constitución hondureña.
Ayer miércoles fue suspendido el toque de queda por unas cuantas horas y las personas en una histeria colectiva abarrotaron supermercados y gasolineras. Y horas antes la necesidad de las personas por alimento se irrumpieron varios centros de abastecimiento por la madrugada en diversos barrios y colonias en la capital. Lo que obligó en cierta manera a suspender el toque de queda y las personas pudieran hacer sus compras de comida.
La Radio Globo y Canal 36 han sido los medios mas afectados con interrupciones a sus transmisiones, quedando estos medios en la clandestinidad prácticamente. Son los únicos que emiten junto a Canal 6 y Canal 11 con objetividad noticiosa y brindan espacios para que la población hondureña informe sobre lo que ocurre en su comunidad o localidad.
Se han detenido centenares de ciudadanos y en el caso de Tegucigalpa son llevados al complejo deportivo José Simón Azcona conocido como Villa Olímpica convirtiendo este prácticamente en campo de concentración donde los detenidos son expuestos al sol y la lluvia y hacer las penitencias que la milicia les impone.
Los actos vandálicos que se han suscitado son propiciados por la policía quienes han utilizado bombas lacrimógenas y proyectiles de bala para hacer retirar a las personas en las calles.
Para las próximas se espera la resolución de los países miembros de la ONU y Consejo de Seguridad de este ente mundial para intervenir en la restitución de José Manuel Zelaya Rosales, que desde el lunes se encuentra en la Embajada de Brasil y rodeado de militares. Y se rumora francotiradores en diversos edificios adyacentes a la embajada.
La sociedad hondureña esta dividida por unos cuantas personas que no ceden a su terquedad, a la sensatez.
Hasta pronto amigos, si es que no me encarcelan o hieren con las “balas de goma” por andar en la calle con el derecho que me asiste la constitución como hondureño…
ARTICULO 3.- Nadie debe obediencia a un gobierno usurpador ni a quienes asuman funciones o empleos públicos por la fuerza de las armas o usando medios o procedimientos que quebranten o desconozcan lo que esta Constitución y las leyes establecen. Los actos verificados por tales autoridades son nulos. el pueblo tiene derecho a recurrir a la insurrección en defensa del orden constitucional.
a 89 días del golpe de estado militar en Honduras
Hola amigos, pues aquí estamos muy bien y sanos y salvos a pesar de que en la ciudad capital Tegucigalpa ha sido el blanco de brutal represión por parte de las fuerzas policiales y militares. En especial los jóvenes que marchan con “La Resistencia”, no se si llamarle masoquismo o indignación pues cuando ocurren hechos contra los manifestantes queriendo ingresar a la Colonia Palmira mas personas se unen a la causa, también les informo que “la resistencia” está en cada uno de los barrios y colonias capitalinas, una especie de barricadas ya que no se está dejando el libre paso por las principales calles de la ciudad.
Estos últimos tres días (21 – 23 septiembre) hemos estado todos los hondureños presos en nuestros propios hogares desde Islas de La Bahía hasta Choluteca y de Copan a Gracias a Dios. Desde el lunes a las 4 pm hemos estado en toque de queda tras toque de queda. Que ha sido incumplido por quienes no reconocen estas autoridades y en su justa razón y apego al artículo 3 de la constitución hondureña.
Ayer miércoles fue suspendido el toque de queda por unas cuantas horas y las personas en una histeria colectiva abarrotaron supermercados y gasolineras. Y horas antes la necesidad de las personas por alimento se irrumpieron varios centros de abastecimiento por la madrugada en diversos barrios y colonias en la capital. Lo que obligó en cierta manera a suspender el toque de queda y las personas pudieran hacer sus compras de comida.
La Radio Globo y Canal 36 han sido los medios mas afectados con interrupciones a sus transmisiones, quedando estos medios en la clandestinidad prácticamente. Son los únicos que emiten junto a Canal 6 y Canal 11 con objetividad noticiosa y brindan espacios para que la población hondureña informe sobre lo que ocurre en su comunidad o localidad.
Se han detenido centenares de ciudadanos y en el caso de Tegucigalpa son llevados al complejo deportivo José Simón Azcona conocido como Villa Olímpica convirtiendo este prácticamente en campo de concentración donde los detenidos son expuestos al sol y la lluvia y hacer las penitencias que la milicia les impone.
Los actos vandálicos que se han suscitado son propiciados por la policía quienes han utilizado bombas lacrimógenas y proyectiles de bala para hacer retirar a las personas en las calles.
Para las próximas se espera la resolución de los países miembros de la ONU y Consejo de Seguridad de este ente mundial para intervenir en la restitución de José Manuel Zelaya Rosales, que desde el lunes se encuentra en la Embajada de Brasil y rodeado de militares. Y se rumora francotiradores en diversos edificios adyacentes a la embajada.
La sociedad hondureña esta dividida por unos cuantas personas que no ceden a su terquedad, a la sensatez.
Hasta pronto amigos, si es que no me encarcelan o hieren con las “balas de goma” por andar en la calle con el derecho que me asiste la constitución como hondureño…
ARTICULO 3.- Nadie debe obediencia a un gobierno usurpador ni a quienes asuman funciones o empleos públicos por la fuerza de las armas o usando medios o procedimientos que quebranten o desconozcan lo que esta Constitución y las leyes establecen. Los actos verificados por tales autoridades son nulos. el pueblo tiene derecho a recurrir a la insurrección en defensa del orden constitucional.
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